Pedagogía de la presencia de Antonio Carlos Gomes Da Costa

Introducción
Esta obra fue escrita por Antonio Carlos Gomes Da Costa y se dirige a educadores que procuran mejorar su forma de desempeñarse frente a personas que requieren de su ayuda. Brinda visiones sobre la problemática de la adolescencia privada de libertad, en situaciones difíciles, a la vez que ofrece diferentes formas de atención a estos jóvenes, logrando el respeto mutuo entre educadory educando. Es una obra basada en la importancia de la presencia frente al adolescente.
"Antonio Carlos construye un territorio para el dialogo; un lugar donde educandos y educadores en circunstancias especialmente difíciles enfrenten el desafío de la libertad en la mas paradojal de las situaciones: privados de libertad. Uno, el educando, privado de la más elemental de las libertades; el otro, eleducador, privado de las razones para entender la libertad."

Educación y Presencia: de la soledad al encuentro
Cada vez son más en nuestra sociedad los adolescentes que necesitan una efectiva ayuda personal y social para la superación de los obstáculos que impiden su pleno desarrollo como personas y como ciudadanos. El primer paso es la reconciliación del joven consigo mismo y con los otros,lo que genera un cambio en su forma de inserción en la sociedad que le permite concretar un camino más digno y humano para la vida.
El adolescente expresa mediante formas de conducta divergentes o antagónicas omisiones y transgresiones que violentan su integridad y desvían el curso de su evolución personal y social. Este tipo de conductas deben ser vistas y sentidas con una respuesta humana a lasdificultades que ahogan su existencia. Cuando estos pedidos de ayuda se enfrentan a la indiferencia, a la ignorancia, el adolescente se encierra en un mundo propio resultando la perdida y el daño de su persona.
Hacerse presente en la vida del educando es el dato fundamental de la acción educativa dirigida al adolescente en situación de dificultad personal y social. Esta capacidad no es un don,sino una aptitud posible de ser aprendida mientras exista la disposición interior por parte de quien se propone aprender. Ese aprendizaje es una tarea que exige la implicación entera y compromiso del educador en el acto de educar. Esto sin involucrarse ilimitadamente e irreflexivamente, sino que debe haber entre el educador y el educando una disciplina de proximidad - distanciamiento, mediante lacual el educador logra acercarse al máximo al educando e involucrarse con su problemática de forma significativa dentro de una relación de calidad. Y, a la vez, distanciarse para percibir desde el punto de vista de la totalidad del proceso, como sus actos se enlazan en la concatenación de los acontecimientos que configuran el desarrollo de la acción educativa.
Ante manifestaciones inquietantes deleducando (impulsos agresivos, intolerancia a cualquier tipo de norma, apatía, indiferencia, etc.) el educador debe ser capaz de captar, además de los aspectos negativos, el pedido de auxilio que el joven manifiesta. Siempre prestando total atención y cuidado al mal uso que el educando puede hacer (manipulación, chantaje afectivo, apego desmesurado, dependencia) de los "buenos sentimientos" y los"buenas intenciones" de un educador que se deja llevar demasiado por las emociones de esta relación educador-educando, lo que puede echar a perder todo el proceso.
El educador debe poseer una base conceptual solida y articulada que le permita proceder a la lectura, la organización y el dominio de su aprendizaje practico.
Frente a adolescentes con serios problemas de conducta, el educador,mediante el enfoque de adquisición (donde el educando supera sus dificultades con la auto-comprensión, valoración y fortalecimiento de los aspectos positivos de su personalidad) procura partir de lo que el adolescente es, de lo que sabe, de lo que se muestra capaz, y lograr que éste pueda emprender, por si mismo, la construcción de su ser en termino personales y sociales. Que pueda enfrentarse...