Pedos

CAPÍTULO I
DE LAS VARIAS CLASES DE PRINCIPADOS Y DEL MODO DE ADQUIRIRLOS
Inicia explicando, o más bien, clasificando los “principados”. Los divide en:
Hereditarios y nuevos. Los hereditarios, en quien los disfruta, provienen de su familia.
Los nuevos se adquieren de dos modos: por vía directa de la proclamación o al añadirse un pueblo al Estado. El nuevo príncipe pudo haber adquirido aquelnuevo reino con la ayuda de armas ajenas, propias, gracias a la suerte y en el mejor de los casos, a su valor. 

CAPÍTULO II
DE LOS PRINCIPADOS HEREDITARIOS
Nos menciona que es en los Estados hereditarios, que están acostumbrados a ver reinar la familia de su príncipe, donde hay menos dificultad en conservarlos que cuando son nuevos.
Pues no se necesita más que no “echar a perder” loestablecido por sus antecesores y actualizar su mandato con su presente. Siendo relativamente fácil el continuar de esta forma en el poder, evitando volverse aborrecible por los gobernados que naturalmente ya “lo aman” incluso por costumbre. Cosa que podría aplicar al “cambio” de gobierno que se da en el país (México) de forma negativa, puesto que seguir con lo ya conocido si bien da estabilidad no es lomejor, puesto que lo “ya conocido” no es lo mejor.

CAPÍTULO III
DE LOS PRINCIPADOS MIXTOS
Son mixtos cuando el principado no es enteramente nuevo, sino miembro añadido a un principado antiguo que se posee de antemano.
Con respecto a estos nos menciona que hay facilidad de conservarse sí se habla la misma lengua y rige la misma providencia.
En cambio, sí la nueva adquisición contienealgunas diferencias de lenguaje, pero semejantes costumbres, entonces, para poseerlos con seguridad basta haber extinguido la descendencia del príncipe anterior, y asi, respetando sus antiguos estatutos, y siendo allí las costumbres iguales a las del pueblo a que se juntan, aunque existan algunas diferencias de lenguaje, las costumbres se asemejan, y esas diversas provincias viven en buena armonía y sise logra no modificar, en lo posible, sus leyes e impuestos,  de ésta manera, el cambio de soberano pasará casi imperceptible para los gobernados.
Pero, si llegan a existir problemas en reglas, idioma o las dificultades son mayores.
Aquí se sugiere que el príncipe suprima de inmediato cualquier asomo de rebelión o descontento y establecer residencia en el lugar, para tener mayor posibilidad derepresión a que si se encontrara en otro lugar.
Siguiere la creación de colonias, que, a su vez, son de mucha ayuda para mantener el orden y la vigilancia del nuevo estado adquirido.
A sí mismo, el príncipe que adquiere una provincia, cuyo idioma y cuyas costumbres no son los de su Estado principal, debe convertirse en jefe y protector de los reinos vecinos –sobre todo de los menos fuertes-para lograr que se debiliten los reinos vecinos y poderosos.
Debe, además, hacer de manera que no entre en su nueva provincia un extranjero tan poderoso como él, para evitar “problemas” con los que se encuentran o pudieran encontrar descontentos con el principado actual. Por ejemplo a los príncipes menos poderosos. La única precaución que ha de tomar es la de impedir que adquieran fuerza yautoridad en demasía.
Finalmente a raíz de esto pone de ejemplo a los Romanos, a los que siguiendo estas reglas (poblar con colonias todas las provincias de las que se adueñaron, no permitir que los reinos vecinos aumentaran su fuerza y no dejar que alguna potencia extranjera se instale en las cercanías), lograron, sabiamente, prevenir que alguien poderoso, haciendo alianzas con los menos fuertes,pudiera en un momento dado convocar una rebelión y “eliminar” al imperio. De la misma forma con varios ejemplos históricos.

CAPÍTULO IV
POR QUÉ, OCUPADO EL REINO DE DARÍO POR ALEJANDRO, NO SE REBELÓ CONTRA SUS SUCESORES DESPUÉS DE SU MUERTE
Considerando las dificultades que se ofrecen para conservar un Estado recientemente adquirido, podría preguntarse con asombro cómo sucedió que hecho...