pelicula 42
Robinson fue elprimer afroamericano en jugar profesionalmente al baseball, una disciplina absolutamente integrada por caucásicos. Lo que hoy parece totalmente normal era impensado hace apenas décadas atrás, tanto enlos estados sureños como en ciudades más cosmopolitas de Estados Unidos.
Django Unchained nos refregaba en la cara el racismo de una época, para luego liberar la tensión a puro disparo y“justicia por mano propia”. Aquí Robinson no es el fantástico vengador de los desprotegidos. Vemos cómo él y muchos otros tuvieron que resistir tragándose la rabia y poniendo -en ocasiones literalmente-la otra mejilla.
La valentía del oprimido pocas veces logra el cambio social necesario sin el apoyo de alguien en el bando opresor. Ese alguien es Branch Rickey, un ejecutivo del equipo Brooklyn’sDodgers que no solamente tuvo la visión y el coraje para sumar a alguien de raza negra, sino que también a la estrella latina Roberto Clemente.
Rickey está magníficamente interpretado porHarrison Ford, quien se brinda al máximo en un rol inusual en la carrera del actor. Ford logra con su energía y comprometida labor robarse el foco de atención. Seguramente veremos su laborrecompensada en la próxima temporada de premios. Chadwick Boseman prueba que la televisión le queda chica y que está listo para, valga el juego de palabras, las grandes ligas.
42 es una película visualmenterica, con grandes actuaciones y un libreto muy pulido. Al igual que cintas como Rocky logra trascender la actividad deportiva en cuestión, educando e inspirando al público general.
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