Pensamiento colombiano
La primera de las dos partes de este libro elabora una narración de la historia delpensamiento filosófico colombiano, desde los días de la Colonia hasta la fecha, siguiendo la clave de la historia de las ideas y su consabida preocupación por las corrientes académicas, los autores y las obras producidas en el marco de la nación. Dentro de los lineamientos más habituales, Pachón Soto establece una periodización de cuatro grandes momentos: Colonia, Ilustración, siglo XIX y Modernidad, aestas le suma algunos puntos de tránsito entre estos grandes momentos. Gracias a esto pueden contarse quince etapas del pensamiento filosófico en Colombia.
Una de las novedades de esta periodización es su última etapa, "Balance y perspectivas de la filosofía en Colombia". Aquí Pachón Soto señala, de un lado, algunos factores limitantes del desarrollo de la filosofía en este país: el rumbo tomadopor España en los siglos XV y XVI, su "mentalidad medievaloide", la falta de tradición para mirar críticamente el pasado y recibir lo proveniente de Europa, el uso ideológico de la filosofía. De otro lado, muestra algunos obstáculos que aún deben enfrentarse: excesivo profesionalismo, vacío de tradición, "fetichización del pensamiento europeo", el papel marginal del filósofo en la sociedad, lafalta de una academia dinámica y en diálogo. En síntesis, este apartado hace un diagnóstico del estado y las posibilidades del ejercicio de la filosofía en Colombia, presenta buena parte de la bibliografía reciente sobre el pensamiento filosófico nacional y muestra que el crecimiento de la oferta de facultades de filosofía, además del aumento de las publicaciones especializadas, son una prueba delfortalecimiento de esta disciplina; la cual, sin embargo, aún no habría alcanzado un nivel óptimo. La periodización del libro de Pachón Soto también resulta novedosa por afirmar que de
normalización filosófica en Colombia solo es posible hablar a partir de los años setenta. Si bien gran parte de los maestros que se formaron en Alemania regresaron en los años sesenta, el fruto de sus enseñanzas,sus incitaciones, sus primeros discípulos, etc., se da años después (119).
Claro que esta afirmación no es una objeción a la tesis corriente sobre la normalización en Colombia, solo es un desplazamiento de la misma periodización, en la cual la generación de los treinta y cuarenta cumple el papel de fundadores (los de las últimas décadas del siglo XIX para el resto del continente). Para...
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