Pepe patatas

El cine, el séptimo arte, tan presente entre nosotros hoy en día. Quién no ha disfrutado de una película; ya sea para relajar el estrés de una ardua semana laboral; para compartir (mejor dicho gastarmás de 100 nuevos soles en una sola función) con la familia o para aquellos tiernos tórtolos que no encuentran mejor lugar que una sala de cine para disfrutar del amor que Dios les dio. Hay películasde toda índole e interés: Acción, románticas, terror del bueno (terror psicológico) y terror del malo (tripas y sangre por doquier sin ningún sentido), suspenso, etc., etc. Pero no todo sonexplosiones, sangre, besos, situaciones graciosas o sustos por doquier… ¡No señores! Eso, que nos brindan a nosotros nuestros amigos los cineastas, es un trabajo duro y costoso para desarrollar. Puede llegar aser un dolor de cabeza gastar tanto dinero en una producción, pero con un buen presupuesto analizado y elaborado matemáticamente, el grupo encargado de una película logrará un buen lanzamiento sinnecesidad de derrochar tanto capital. Es precisamente ahí donde la querida y amada matemática hace su aparición. Calcula el costo de los materiales, localidades, parafernalia necesaria para realizar lapelícula (cámaras, procesadores, luces, lentes, computadoras, cintas, utilería, pantallas, megáfonos, micrófonos, etc.), cuantos millones les pagarán a los actores, efectos especiales, pre-producción,post-producción, publicidad, avances, diseño de los vestuarios, maquillaje, sueldo de los héroes detrás de cámara (camarógrafos, maquilladores, fotógrafos, nerds a cargo de la parte computarizada dela película y hasta empleados encargados de cumplir al pie de la letra los caprichos de los glamurosos directores, productores y actores), extras, dobles de acción, emoción y pasión (que se llevan laparte más difícil mientras los actores beben un rico café y memorizan su guión), y cómo olvidarnos de las bandas sonoras que tanta emoción y sentido le dan a la superproducciones y a las no tan...