Perder el tiempo
Si, perder el tiempo.
Aclaro que no estoy revindicando elderecho al “ocio" sino, más bien, el derecho de simplemente no hacer nada aparentemente productivo. Una de las condicionantes típicas de la adultez, o un síntoma del progreso hacia ese estado, sueleser cuantificar todo, calcular tiempos en prácticamente cada cosa de nuestras vidas y angustiarse al desaprovechar instancias que antes eran momentos simplemente perdidos. Por ejemplo, antes solía usarmi tiempo en el el transporte urbano, lease bondis, para nada. Si, nada. Solo me sentaba y pensaba, en el mejor de los casos y en otros simplemente me estacionaba en algún lugar indefinido de mimente. Pero en los últimos tiempos empecé a tomar cierta repulsión a esos minútos vacíos, y decidí llenarlo con alguna actividad, casi siempre, leer. No me arrepiento de esta elección, llevar algún queotro libro para viajes que diariamente rondan la hora y media no está mal, pero si empecé a pensar que antes le daba un valor mucho mayor al perder el tiempo. Cuando me dí cuenta de esto empecé areflexionar y de inmediato, decidí experimentar de una forma bastante simple; empecé a sustituir, cada tanto, ratos libres que antes dedicaba al ocio activo por el arte del tiempo completamente improductivo.Mi primer ejercicio, y el más constante por el momento (aunque no por eso regular) fue el de, luego de mis clases en la facultad, o en alguna hora puente en la que no estaba acompañado (en generalestoy con alguien, así que como dije arriba, tampoco es algo común), irme a una plaza cercana y tirarme en el pasto a ver el cielo. Reconozco que a veces me he dormido, pero la idea fue y es, siempreque puedo, mantenerme despierto, intentar dejar la mente en blanco, lo más en el blanco que sea posible y no dedicarme a actividad alguna, solo tirarme en el pasto y ver alguna que otra nube pasar....
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