Periodista



Del Nobel al hecho hay mucho trecho.
En medio de, quizá, la más aguda crisis económica del hemisferio occidental en un siglo, muchos se preguntan: ¿quién tiene la salida? La esperanza no se asienta en la banca ni en los ministros de finanzas ya. Los académicos, y en este caso, los más destacados, entran en escena como quienes deberían tener respuestas. ¿Qué pueden hacer los premios Nobel deEconomía por el mundo?
El Palacio de Conciertos de Estocolmo, la alfombra azul, la N bordada en el centro del escenario, los vestidos de gala, la familia real sueca, pocos periodistas. Ahí, en diciembre, casi anónimos, Eugene F. Fama, Lars Peter Hansen y Robert J. Shiller, los tres ganadores del Premio Nobel de Economía 2013, serán los protagonistas.
Si bien desde 1.901 se entregan lospremios otorgados por la Fundación Alfred Nobel, fundada un año antes, solo hasta 1.969 se aceptó a la Economía como una ciencia lo suficientemente rigurosa para poder ser calificada, y exaltados sus estudiosos, con el galardón que lleva el apellido del famoso empresario sueco que creó un emporio gracias a la dinamita.
Los Nobel de Literatura, Medicina y Paz se roban la atención de los medios masivosen el mundo, y la imagen de los galardonados en estas categorías son esperados con ansia por sus compatriotas, los analistas y por un público que se siente interpretado, o por lo menos, tocado por las obras de esos científicos, escritores y políticos. En contraste, el de Economía no parece despertar la misma expectación. “El Nobel de Economía es el hijo “bastardo” (…). Peor aun después de laterrible crisis en la que se vio inmerso el mundo desde el 2008 y que ha significado enorme desempleo en muchos países y una gran pérdida de bienestar, pues la economía como ciencia no ha salido bien librada de este episodio y en diversos medios hacen referencia a la “ciencia lúgubre o deprimente” (dismal science), incapaz de predecir y explicar eventos tan dramáticos como la crisis mundialreciente.”, afirma Alejandro Villalópez, Doctor en Economía de la Universidad de Washington, Especialista en macroeconomía entre otras áreas, e investigador y profesor del CIDE en México.
Puede sonar extrema esa lectura de la realidad, pero no está lejos de lo que gran parte de la opinión pública, ilustrada o no, piensa, si no de los economistas y sus premios, sí de la economía de acuerdo a cómo sientesus bolsillos. En esta ciencia, como en el fútbol por ejemplo, sucede que todos tienen su fórmula, su solución, su salida. En grado Micro o Macro la Economía aborda el día a día de cada individuo, de sus aspiraciones, emprendimientos, los de la sociedad en sus islas de intereses, los de un país y su futuro, los del mundo y su bienestar, su posibilidades de ser y crecer. De forma que estoscientíficos sociales no la tienen fácil cuando de su trabajo se habla.
Nobel, ¿para qué?
Partiendo de la conocida reflexión del ex presidente colombiano Darío Echandía, “¿el poder para qué?, se puede hacer un resumen de lo que en medio de los indicadores de la economía global actual cualquier ciudadano se pregunta: ¿Los Nobel para qué?
De entrada, es importante entender que, diferente a las otrasciencias, en la Economía se tienen en cuenta para los premios solo trabajos que tengan entre 15 y 25 años de desarrollo y pruebas a partir de las contribuciones originales, esto “porque se considera importante esperar las críticas y las subsiguientes pruebas de la relevancia de las contribuciones, que para el caso de las ciencias sociales, toma más tiempo que en las "ciencias exactas", debido a que elcomportamiento económico es más complejo y varía en el tiempo.”, explica el economista Julián David Monroy D'eroz, de la Universidad del Valle, Colombia, experto en mercados financieros y profesor en esa institución.
Tal cuidado sobre los trabajos escogidos representa una garantía de que las propuestas teóricas no se han quedado en el papel y, por el contrario, su validez se transa en las...