Pio Baroja Franquismo

Páginas: 9 (2069 palabras) Publicado: 25 de noviembre de 2013
ENTREVISTA A PÍO BAROJA
7 de Diciembre de 1937 ― París
En un barrio céntrico de la capital francesa encontramos sentado en un café parisino a un hombre de casi sesenta y cinco años, abrigado de arriba abajo, y con una taza de té entre sus manos. Así se nos presenta el escritor Pío Baroja, exiliado en Francia desde que comenzó la Guerra Civil en España entre el bando republicano y elbando franquista.
Pio Baroja es un escritor nacido en la ciudad de San Sebastián en el año 1892. Estudiante de medicina, Pio Baroja terminó la carrera y, finalmente, probó suerte en el mundo de la escritura, en el que ha ido progresando desde sus primeros escritos. En 1900 publicó su primera colección de cuentos, Vidas sombrías, mientras trabajaba en una panadería con su tío. Poco a poco, fuecreando amistades con otros escritores literarios como Miguel de Unamuno o Benito Pérez Galdós.
Tras compartir unas pequeñas palabras, finalmente comienzo a realizarle mis preguntas.
Pregunta: El año pasado, nada más comenzada la guerra, usted vivió un suceso que le hizo marcharse apresuradamente del país. ¿Podría relatárnoslo?
Respuesta: Me encontraba yo veraneando como cada año en un pueblollamado Vera de Bidasoa. Ya habíamos escuchado el comienzo de lo que se veía venir en aquel tiempo, y lo que le ha sucedido a este país durante toda su historia más veces de las que recuerdo. Una guerra. Uno de esos días, unos de mis amigos médicos y yo fuimos a dar un paseo hasta el pueblo de Santesteban. Créame que aquel día era un día de lo más típico. De pronto, nos encontramos con una partida decarlistas que debían de dirigirse a Guipúzcoa. Mala suerte para mi compañero, para un inspector de policía y para mi, que acabamos detenidos y encarcelados por éstos durante un día. Por suerte no me pegan un tiro, ¿sabe? Todo porque soy un antitradicionalista. Claro que lo soy, y enemigo del pasado también. Porque todos los pasados, y en particular el español, que es el que más me preocupa, no meparecen espléndidos, sino negros, sombríos, poco humanos.
Al día siguiente, un oficial del ejército, Martínez Campos, nos liberó a mí y a mi amigo. En aquel momento lo tuve claro: debía de irme de aquel país cuanto antes, y así hice. Nada más llegue a Vera, cogí las pertenencias que pude y fui a pie hasta Francia.
¿Sabe que hicieron al final los requetés que me detuvieron? Asaltaron el casino dela Unión Republicana de Alzate, arrojando los libros de la pequeña biblioteca del casino a la calle, en unión de los papeles de música de la banda, quemando unos y otros. Se apoderaron también de dos cornetines y de dos tambores. Uno de los requetés intentó tocar con el cornetín la Marcha Real, pero como sus conocimientos filarmónicos no se lo permitieran, se conformó con tocar una jota navarra.P: Interesante anécdota la que me acaba de contar. Y, ahora bien, ¿qué piensa del tiempo de República que hemos vivido en España antes del comienzo de esta guerra?
R: Antes del comienzo de la República, yo lo tenía bien claro. No veía posible ese sistema conservador. Y, además, con él vendría una clara revolución, con violencias y sangre, y de la que no conoceríamos su fin. Nadie podría oponersede verdad a aquello. ¡Y mucho menos los escritores! El único que lo podría evitar sería un hombre de talento político pero, como se ha visto, no lo hay.
Como he mencionado, no creí, ni creo, en la posibilidad en España de una República tranquila, discreta. Es decir, no he creído que arraigaría, y menos si tomaba un carácter anticlerical y medio socialista. Pero mire usted lo que ocurrió alfinal. No consideraba esta idea mía como un mérito, ni como un descubrimiento, sino como una pequeña intuición individual, consecuencia de vivir aislado y de ver los asuntos públicos con los ojos de la cara, como algo lejano a mí.
El día que anunciaron la República, yo me encontraba en la redacción del periódico “Ahora”, donde yo colaboraba. Los periodistas se felicitaban por la novedad y algunos...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • pio baroja
  • Pio Baroja
  • pio baroja
  • Pio Baroja
  • Pio Baroja
  • Pío Baroja
  • pio baroja
  • Pio Baroja

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS