platero y yo

Páginas: 127 (31701 palabras) Publicado: 31 de agosto de 2014
Platero y yo
Juan Ramón Jiménez
A
La memoria de
Aguedilla
La pobre loca de la calle del Sol
Que me manda moras y claveles

Advertencia a los hombres
que lean este libro para niños

Este breve libro, en donde la alegría y la pena son gemelas, cual las orejas de
Platero, estaba escrito para... ¡qué sé yo para quién!... para quien escribimos los
poetas líricos... Ahora que va a losniños, no le quito ni le pongo una coma. ¡Qué
bien!
"Dondequiera que haya niños -dice Novalis-, existe una edad de oro." Pues por
esa edad de oro, que es como una isla espiritual caída del cielo, anda el corazón del
poeta, y se encuentra allí tan a su gusto, que su mejor deseo sería no tener que
abandonarla nunca.
¡Isla de gracia, de frescura y de dicha, edad de oro de los niños; siempre tehalle yo en mi vida, mar de duelo; y que tu brisa me dé su lira, alta y, a veces, sin
sentido, igual que el trino de la alondra en el sol blanco del amanecer!

EL POETA
Madrid, 1914.

Capítulo 1
Platero
Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de
algodón, que no lleva huesos. Sólo los espejos de azabache de sus ojos son duros
cual dos escarabajos de cristalnegro.
Lo dejo suelto, y se va al prado, y acaricia tibiamente con su hocico, rozándolas
apenas, las florecillas rosas, celestes y gualdas... Lo llamo dulcemente: “¿Platero?”
y viene a mí con un trotecillo alegre que parece que se ríe en no sé qué cascabeleo
ideal...
Come cuanto le doy. Le gustan las naranjas mandarinas, las uvas moscateles,
todas de ámbar; los higos morados, con sucristalina gotita de miel...
Es tierno y mimoso igual que un niño, que una niña...; pero fuerte y seco por
dentro como de piedra. Cuando paso sobre él, los domingos, por las últimas callejas
del pueblo, los hombres del campo, vestidos de limpio y despaciosos, se quedan
mirándolo:
—Tien’ asero...
Tiene acero. Acero y plata de luna, al mismo tiempo.
Capítulo 2
Mariposas blancas
La noche cae,brumosa ya y morada. Vagas claridades malvas y verdes perduran
tras la torre de la iglesia. El camino sube, lleno de sombras, de campanillas, de
fragancia de hierba, de canciones, de cansancio y de anhelo. De pronto, un hombre
oscuro, con una gorra y un pincho, roja un instante la cara fea por la luz del
cigarro, baja a nosotros de una casucha miserable, perdida entre sacas de carbón.
Platero seamedrenta.
—¿Va argo?

1

—Vea usted... Mariposas blancas...
El hombre quiere clavar su pincho de hierro en el seroncillo, y no lo evito. Abro la
alforja y él no ve nada. Y el alimento ideal pasa, libre y cándido, sin pagar su
tributo a los Consumos...

1

¿Lleva algo?
Capítulo 3
Juegos del anochecer

Cuando, en el crepúsculo del pueblo, Platero y yo entramos, ateridos, por laoscuridad morada de la calleja miserable que da al río seco, los niños pobres
juegan a asustarse, fingiéndose mendigos. Uno se echa un saco a la cabeza, otro
dice que no ve, otro se hace el cojo...
Después, en ese brusco cambiar de la infancia, como llevan unos zapatos y un
vestido, y como sus madres, ellas sabrán cómo, les han dado algo de comer, se
creen unos príncipes:
—Mi pare tié un relo eplata.
—Y er mío, un cabayo.
—Y er mío, una ejcopeta.
Reloj que levantará a la madrugada, escopeta que no matará el hambre, caballo
que llevará a la miseria...
El corro, luego. Entre tanta negrura, una niña forastera, que habla de otro modo, la
sobrina del Pájaro Verde, con voz débil, hilo de cristal acuoso en la sombra, canta
entonadamente, cual una princesa:
Yo soy laaa viudiiitaa
delCondeee de Oréé...
...¡Sí, sí! ¡Cantad, soñad, niños pobres! Pronto, al amanecer vuestra adolescencia,
la primavera os asustará, como un mendigo, enmascarada de invierno.
—Vamos, Platero...
Capítulo 4
El eclipse
Nos metimos las manos en los bolsillos, sin querer, y la frente sintió el fino aleteo
de la sombra fresca, igual que cuando se entra en un pinar espeso. Las gallinas se
fueron...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • platero y yo
  • platero y yo
  • Platero y yo
  • platero y yo
  • Platero y yo
  • Platero y yo
  • el platero y yo
  • platero y yo

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS