pobreza extrema
Ésta es mi historia.
Nací en una familia acomodada, del barrio más rico y famoso de Madrid. Tenía los pañales, la cuna y los juguetes más caros. Laniñera que me cuidaba era especialista en pedagogía y era considerada como la mejor en todo el país; mis padres la mandaron llamar especialmente para mí.
Fui, desde maternal, al colegio privadobilingüe que más prestigio tenía. Apenas cumplí los 16 años cuando ya manejaba la mejor motocicleta que se vendía en el mercado. Dos años después ya maneja el coche que quería.
Siempre fui líder.Durante mis años de adolescencia fui capitán del equipo de baloncesto y de fútbol. En las aulas, también era el mejor. Sacaba las mejores notas en todas las materias, y si en alguna bajaba un poco, ahítenía enseguida un profesor que me apoyaba para volver otra vez a la máxima calificación.
Vestía las mejores ropas que hubiera a la moda. Los mejores manjares estaban siempre en mi mesa. Todas laschicas me perseguían porque era guapo, vestía bien y lucía mejor. Todo propiciado por las clases de protocolo y saber estar que me enseñó una experta en todo ello, contratada por mis padres.Viajaba a todos los lugares que quería, sin importar lo que costaba el billete de avión o el alojamiento en el hotel. Entré a la mejor universidad. Estudié derecho, como mi padre, un abogado de muchorenombre.
Me corría todas las juergas que quería y más. Tenía una gran cantidad de amigos, algo que siempre fue así desde la infancia.
Me titulé siendo el primero de mi promoción. Ahora dirijo unfamoso bufete de abogados
Y aquí me encuentro…solo.
En una oficina que se hace inmensa.
Sin poder tratar a un cliente: yo mismo.
Lo que veo en el espejo no me gusta. Su reflejo me muestra auna persona sin calidad humana, que no respeta principios, ideales o creencias.
Hoy en la penumbra de mi existencia me doy cuenta que no soy capaz de dirigirme a uno de los abogados a mi cargo...
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