pobreza y desigualdad
Nelly Stromquist
En su artículo la autora analiza la injerencia de la pobreza y de la educación en Latinoamérica, especialmente en lo que a la vida de las mujeres y niñas se refiere. Llega a la conclusión de que el aspecto del género en su complejidad social contribuye considerablemente a la postergación de este sectorde la población. En su opinión, la pobreza no podrá ser combatida de manera eficaz mientras persista la discriminación en materia de género. Nelly Stromquist es profesora de Educación para el Desarrollo Internacional de la Escuela de Educación Rossier de la Universad de Baja California. Sus especialidades son la equidad social y la política pública. Reproducimos este artículo gracias a lagentileza de BAICE and Taylor & Francis. Se trata de una versión resumida del artículo «What poverty does to Girls’ Education: the Intersection of Class, Gender and Policy in Latin America» (La influencia de la pobreza en la educación de niñas: la intersección de clases sociales, género y orientaciones en América Latina) publicado en COMPARE, volumen 31, N0 1/marzo 2001, pp. 39-56
Pobreza y escolaridaden la vida de las niñas y mujeres en América Latina
Introducción
América Latina es la región del mundo donde la forma colonial de organización social se mantuvo vigente por más tiempo, alrededor de trescientos años desde la llegada de los conquistadores españoles (1492) hasta las primeras guerras de independencia (1810). La mezcla social de poblaciones sometidas (indias), esclavos africanos yuna minoría blanca dominante, que se mantuvo después de dicha época, no condujo al establecimiento de relaciones equitativas de intercambio social y económico. La región se sigue caracterizando por la coexistencia de enormes propiedades que pertenecen a acaudalados descendientes de los colonizadores, y una agricultura de subsistencia practicada por un campesinado impotente y explotado. Con el pasodel tiempo un capitalismo agrario basado en la exportación hizo posible la emergencia de una poderosa élite rural capaz de utilizar el poder del estado para perseguir sus propios objetivos. Con las actuales tendencias de competitividad económica, y con la necesidad de desarrollar ventajas comparativas entre los países, es probable que América Latina tenga que mantener su producción agro-industrial,lo que no constituye un buen presagio para la superación de las disparidades sociales.
En la década de 1980, la pobreza se incrementó en América Latina, pasando del 46 por ciento al 60 por ciento en las áreas urbanas, y del 80 al 85 por ciento en el campo. La extrema pobreza se incrementó del 22 al 27 por ciento en las áreas urbanas y del 50 al 52 por ciento en las áreas rurales, de acuerdocon las estadísticas recogidas por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, conocida también como CEPAL. En Brasil, el gigante industrial de América Latina, en 1990 la pobreza urbana se situaba en el 39 por ciento, vale decir un 9 por ciento por encima de su nivel en 1979 y un 5 por ciento por encima de su nivel de 1987. Más recientemente, desde 1990 hasta 1997, según la CEPAL, laproporción de hogares pobres en América Latina descendió del 41 por ciento al 36 por ciento. No es sólo que estos avances son pequeños, sino que el número de personas que viven en la pobreza creció de 136 millones en la década de los ochenta a 207 millones en 1997.
En América Latina, por tanto, la pobreza no es una cuestión de bolsillos permanentemente vacíos de un pueblo carente de educación o decapacitación, sino que más bien es inherente a la estructura económica y social de la región. Esta estructura es al mismo tiempo efecto y causa de relaciones de poder asimétricas entre áreas urbanas y rurales, entre poblaciones indígenas y subculturas mestizas, entre varones y mujeres y, por supuesto, entre el Norte y el Sur.
Pobreza insuperable
En cierto nivel, la pobreza es un concepto...
Regístrate para leer el documento completo.