Poder soberano y violencia

PODER SOBERANO Y VIOLENCIA
Sin duda, la violencia constituye una de las tantas duras realidades de la vida humana que nos cuesta mucho entender y admitir aún bajo grandes reservas. Nada impide, sin embargo, que vaya cobrando fuerza y formas distintas en lo cotidiano de nuestra vida. Todo ello vuelve el término mismo de violencia un concepto confuso e impreciso. Por esta razón, nos seránecesario, en un primer tiempo, hacer un esbozo de algunos de los usos y comprensiones más comunes de dicho concepto. Si recorremos la historia de las reflexiones políticas modernas, veremos que muchos autores solían presentar, con argumentación, desde luego, pero con ingenuidad también, la idea que el Estado tendría la misión de proteger a sus ciudadanos contra la violencia y procurar reducirla almáximo. En esta óptica tiene peso de escándalo el hecho de que otros pensadores empiecen a vincular el surgimiento mismo del poder político con la realidad de la violencia.
De hecho, autores como Walter Benjamin y Giorgio Agamben, los que abordaremos en este ensayo, pretenden reconstituir las formas sutiles y oscuras como se han tejido relaciones mutuas entre el ejercicio del poder y la violencia. Deallí, como parte central de este trabajo, presentaremos el análisis que hace Benjamin de la violencia jurídica, seguido por el del problema del poder soberano planteado por Agamben en Homo sacer. Esta tarea nos llevará también a rastrear algunas ideas sobre la violencia y diversas concepciones de la misma que requieren todavía profundización. Será para nosotros una manera de delimitar los aspectosque pretende cubrir nuestra reflexión.

I. Llamamos violencia1
Como ya hemos dicho, hablar de violencia equivale a manejar un concepto cada vez más difícil de captar. La razón principal de ello, antes de ser la multiplicidad de formas que puede encarnar dicho concepto, radica en la posibilidad de emplearlo en muy diversos y amplios sentidos. Las reacciones mismas de los múltiples grupossocio-culturales que no cesan de emerger extienden sus usos sobre aspectos antes privados de reconocimiento o simplemente omitidos. Miremos cómo este concepto se ha vuelto realmente un campo de investigaciones inagotable.
Normalmente se han encontrado en el pensamiento consideraciones de todo tipo al respecto. Mientras unos ven la violencia como una constante oscura en la historia de los hombres desdeque empezaron a convivir en sociedad, otros la entienden como un elemento natural y biológico que inclina a los individuos a defender su propio cuerpo y espacio, su familia, su comunidad y así sucesivamente. Para otros, no se trata más que de un fenómeno episódico y esporádico, que aparece sin preaviso y desaparece también de repente. En esta categoría se agrupan manifestaciones como lasinsurrecciones, los motines, las guerras civiles, las masacres etc.
Otros análisis pretenden tomar la forma de estudios rigurosos buscándole causas y una estructura al fenómeno de la violencia. En este sentido, la conciben a veces como un aspecto estrictamente social para luego remontar así a ciertas condiciones que la provocan, o como uno estrictamente individual que tiene como protagonista al hombreimpulsivo, violento o agresivo. En unos casos bien específicos, la violencia se relaciona con un grupo o una generación de personas que se identifican por ciertos parámetros comunes. Hasta se la considera en ocasiones como una propiedad exclusivamente masculina, un modo de actuar y de ser vinculado al género masculino.
En lo tocante al proceso de civilización, autores como Norbert Elias definen laviolencia como un elemento esencial e intrínseco al desarrollo de las costumbres y las normas2. En este sentido, el enfoque primordial de las sociedades humanas ha venido siendo la búsqueda de una forma de contención del uso de la violencia. De sus logros, podemos destacar los esfuerzos por transformar la propensión a la violencia por medio de ritos, reglas e instituciones. Pero a este nivel,...