poema mio cid
Mal seaquexan los de Valencia
que non sabent ques far.
De ninguna part que sea
non lea vinie pan;
nin da conssejo padre a fijo,
nin fijo a padre,
nin amigo a amigo
nos pueden consolar.Mala cueta es, señores,
aver mengua de pan,
fijos e mugieres
veer los morir de fanbre.
Delante veyen so duelo,
non se pueden huviar.
Pregona Rodrigo Díaz la guerra contra Valencia,y acuden de todos los reinos cristianos caballeros a acompañarle en la empresa. Cerca a la ciudad el Cid, estrechamente, por espacio de nueve meses. Según una historia árabe, dio un plazo caballerescode quince días para que los sitiados solicitaran socorro a los reyes de Murcia y Zaragoza, y el poema recuerda este hecho en el verso que dice:
"Metióle en plazdo, si les viniessen huviar"(ayudar).
Cumplido el término de la vana espera, la ciudad se rindió y la enseña del Cid ondea sobra el alcázar. Gran riqueza es la que obtienen caballeros y peones: oro, plata, casas y heredades para losantiguos mesnaderos y parte del botín para los nuevos, y eso que eran tres mil seiscientos los que con el Cid estaban.
Afirma Ruy Díaz esta conquista después de vencer al nuevo emir de Sevilla,...
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