poema

Perspectivas de la creación artística:
El viaje que se inicia.

La moda de no decir nada.
El siglo XXI ha recibido a un ser humano abatido, casi convencido de que ha llegado al final de su historia, la mayor parte de las utopías que alimentaron el accionar de los hombres han caído, que duda cabe, podemos discrepar en los motivos, pero la realidad es innegable.
Aprovechándose deestas circunstancias -irrevocablemente temporales- en la actualidad, muchos mercanchifles del arte pregonan que éste avanza hacia el "fin de los fundamentalismos" y la verdad es que, por ejemplo, en la poesía chilena es muy fácil apreciar aquello, ya que los textos que son publicados, en su mayoría están saturados de miradas autorreferentes, de versos rebuscados y snobistas que sólo consiguenalejar a ese supuesto público poético, si es que sigue existiendo. Eso es fácilmente comprobable al leer textos como “Trazado de la ciudad” del poeta Antón Carrasco (uno de los seleccionados del concurso Arte joven de la Universidad de Valparaíso, de reciente premiación). Por más que algo sepamos de la Trapananda, ¿cuál era el mensaje del texto? ¿ Poesía del absurdo, tal vez?; otro ejemplo es “Tierrade hojas” de Rodolfo Hlousek que no dice nada nuevo ni en fondo, ni en forma: “Bajo algún sauce/el río Huaqui/ Sereno respiraba el seXO/ luego figuró el hombre/ nos hicimos tierra de hojas” (esto no es un extracto, es el poema completo, así que no está descontextualizado). Cualquier búsqueda poética es válida, demás está decirlo. Pero ¿no había nada mejor para seleccionar entre losparticipantes?, ¿cuál es el criterio de los jurados? Antes de seguir, debemos hacer justicia y decir que entre los premiados y seleccionados, hay también textos de innegable valor, sin ir más lejos el poema “La Ciudad” de Priscila Oses, que obtuvo el premio Juan Luis Martínez: “Porque corresponde que cuando se acaben las cosas/ sonriamos de pura tristeza/ de pura tristeza para salvarnos” la nostalgia y laesperanza fundidas con singular belleza.
La crítica especializada tampoco queda fuera de este cuestionamiento, y en esto nos apoyamos en Grínor Rojo quien, en un exhaustivo estudio publicado por Lom y titulado: “Diez tesis sobre la crítica” y en el cual refiriéndose a la crítica moderna, dice: que “Su margen de eficacia (de la crítica) pareciera hallarse hoy en los últimos respiros de suagotamiento”. Y ¿a qué nos lleva todo esto?, pues simplemente a concluir que en la actualidad el discurso poético y la crítica, que en muchos casos lo sostiene, están agotados. Prueba fehaciente de ello es que el año pasado un par de escritores de Valparaíso, patrocinados por la universidad de Playa Ancha, llamaron a concurso para llevar a cabo una antología de narrativa. Este llamado fue difundido de diversasmaneras. Para sorpresa de los convocantes los trabajos recibidos fueron poquísimos y de una calidad dudosa, tanto así que declararon al proyecto desierto hasta que nuevos prosistas se dignen a aparecer. Y esto último sin duda será difícil si se sigue intentando convencer a niños y jóvenes de que no hay nada por hacer, que las ideas se murieron hace años, que el mundo y la historia serán de estamanera para siempre. Y matar la creación es asesinar los sueños, la esperanza y la vida.

Arte como registro y vaticinio.
El arte y quienes lo realizan –artistas o no artistas- han tenido casi desde los orígenes la virtud, el ojo avizor y el finísimo olfato de detectar el advenimiento de nuevos tiempos, nuevas épocas para la humanidad. De tal forma que las expresiones artísticas cumplían juntocon su tarea estética propia, cierta función pitonisa. Esto debido a que el verdadero artista se transfigura en un haz de luz que atraviesa fulminante el espacio propio del tiempo que le toca vivir, transformándose así en un autentico barómetro que registra hasta el más leve cambio de temperatura de la realidad que le circunda, marcha siempre en el puesto de avanzada del recorrido humano, en...