poemas de Arthur Rimbaud

Páginas: 31 (7524 palabras) Publicado: 13 de diciembre de 2013
Nacido el 20 de octubre de 1854 en Charleville-Mezières, Arthur Rimbaud, quien con el paso de los años devendría en famosísimo poeta francés, habría de transcurrir su infancia en un ambiente de sordidez bajo una figura materna sumamente autoritaria, poco propicia a trasmitir amor a su prole.

Rimbaud comienza a escribir a los diez años de edad. Y a los diecisiete, crearía un célebre poema quele daría renombre universal: Le bateau ivre (El barco borracho).

Cuando Verlaine, otro celebérrimo poeta francés, conoció aquel poema, prácticamente quedaría hechizado ante ese potencial literario, entablando una relación con Rimbaud que terminaria siendo un drama de pasión.

En efecto, Verlaine, cuya tendencia homosexual era más que manifiesta, buscó, engolosinado, el amor de Rimbaud,quien, no cantando mal las rancheras, en un inicio accedio, pero ... no siendo Rimbaud partidario de las relaciones monogámicas homosexuales, coqueteaba, como se dice comunmente, con Juan y varios, lo que hacia encelar terriblemente a su compañero Verlaine quien, en dos ocasiones, trató de cobrarse las infidelidades de Rimbaud con la vida de éste. Y fue, en el segundo intento, cuando las cosasadquirieron tintes dramáticos, puesto que Rimbaud terminó hospitalizado y Verlaine ... tras las rejas de la prisión.

La obra que a continuación publicamos, Una temporada en el infierno, escrita en 1873, tuvo como inspiración, precisamente, la turbulenta y apasionada relación que Rimbaud mantuvo con Verlaine.

Arthur Rimbaud moriría el 10 de noviembre de 1891 en la ciudad de Marsella.


Unatemporada en el infierno

Antaño, si recuerdo bien, mi vida era un festín en el que se abrían todos los corazones, en el que todos los vinos hacían torrentes.

Una noche, senté a la Belleza sobre mis rodillas. - Y la encontré acerba. - Y la injurié.

Me armé contra la justicia.

Y escapé. ¡Oh hechiceras, oh miseria, oh aversión, es a ustedes solamente que confié mi tesoro!

Logré diluir en miespíritu toda esperanza humana. Sobre todo júbilo, para estrangularlo, hice el salto cauteloso de la bestia feroz.

Llamé a los verdugos para morder la culata de sus fusiles mientras perecía. Llamé a los flagelos para ahogar con arena, la sangre. La desgracia fue mi dios. Me revolqué en el barro. Me sequé con el aire del crimen. Aposté con la locura.

Y la primavera me brindó la risa repugnantedel idiota.

Pero, cuando estaba casi por decir adiós, resolví buscar la llave que me abriera las puertas del festín antiguo, donde quizás recuperaría el apetito.

La caridad es esa llave. - ¡Esta afirmación comprueba que estuve en un sueño!

Permanecerás como una hiena, etc ... exclama el demonio que me corona con duermevelas tan amables. Consigue la muerte con todos tus apetitos, y tuegoísmo y todos los pecados capitales.

¡Ah! He tenido demasiado: - Pero, querido Satán, se lo suplico, ¡tenga la pupila menos irritada! Y esperando esas vilezas que se retrasan, para usted que ama en el escritor la ausencia de facultades descriptivas o instructivas, le arranco algunas hojas ominosas de mi carnet de condenado.


Mala sangre

De mis ancestros conservo los ojos celestes, elcerebro estrecho y la imprudencia de la lucha. Me visto tan bárbaramente como ellos. Pero yo no engraso mi cabellera.

Los Galos eran los desolladores de animales, los desbrozadores más ineptos de su tiempo.

De ellos tengo: la idolatría y el amor por el sacrilegio; - ¡ah! Todos los vicios, cólera, lujuria -magnífica la lujuria-; sobre todo, mentira y pereza.

Me horrorizan todos los oficios.Patrones y obreros, todos campesinos e innobles. La mano con pluma vale la que la mano con arado. - ¡Qué siglo de manos! - Yo nunca tendré mi mano. Después, la domesticidad trae muchos problemas. La honestidad de la mendicidad me acongoja. Los criminales hieden como los castrados: yo estoy intacto y no me importa.

Pero, ¿quién me ha dado esta lengua tan pérfida que es guía y salvaguarda hasta...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Arthur Rimbaud
  • arthur rimbaud
  • Arthur Rimbaud
  • arthur rimbaud
  • arthur rimbaud
  • arthur rimbaud
  • Arthur Rimbaud
  • Arthur Rimbaud

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS