Poemas
Acordaos, por Dios, señora... 1
Acordaos por Dios, señora,
quánto ha que comencé
vuestro seruicio,
cómo vn día ni vna hora
nunca dexo ni dexé
de tal officio.
Acordaos de mis dolores,
acordaos de mis tormentos
qu'e sentido,
acordaos de los temores
y males y pensamientos
qu'e sufrido.
Acordaos cómo en presencia,
me hallaste siempre firme
y muy leal,
acordaos cómo enausencia
nunca pude arrepentirme
de mi mal.
Acordaos cómo soy vuestro
sin jamás auer pensado
ser ageno,
acordaos cómo no muestro
el medio mal qu'e passado
por ser bueno.
Acordaos que no sentistes,
en mi vida vna mudança
que hiziesse,
acordaos que no me distes
en la vuestra vna esperança
que biuiesse.
Acordaos de la tristura
que siento yo por la vuestra
que mostráys;
acordaos ya,por mesura,
del dolor qu'en mí se muestra
y vos negáys.
Acordaos que fuy sugeto
y soy a vuestra belleza
con razón;
acordaos que soy secreto,
acordaos de mi firmeza
y afición.
Acordaos de lo que siento
quando parto y vos quedáys
o vos partís;
acordaos cómo no miento,
aunque vos no lo pensáis
según dezís.
2
Acordaos de los enojos
que m'aués hecho passar
y los gemidos;acordaos ya de mis ojos,
que de mis males llorar
están perdidos.
Acordaos de quánto's quiero,
acordaos de mi desseo
y mis sospiros;
acordaos cómo si muero
destos males que posseo,
es por seruiros.
Acordaos que lleuaréys
vn tal cargo sobre vos
si me matáys,
que nunca lo pagaréys
ant'el mundo ni ante Dios,
aunque queráys;
y aunque yo sufra paciente
la muerte, y de voluntad
mucho lohecho,
no faltará algún pariente
que dé quexa a la'rmandad
de tal mal hecho.
Después que pedí justicia,
torno ya pedir merced
a la bondad,
no por c'aya gran cobdicia
de beuir, mas vos aued
ya piedad;
y creedme lo que os cuento,
pues que mi mote sabéys
que dize assý:
Ni miento ni me arrepiento,
ni jamás conosceréys
ál en mí.
Por fin, de lo que dessea
mi seruir y mi querer
y firmefe,
consentid que vuestro sea,
pues que vuestro quiero ser
y lo seré.
Y perded toda la dubda
que tomastes contra mí
d'ayer acá,
que mi seruir no se muda
aunque vos pensáys que sí,
ni mudará.
Allá verás mis sentidos, 3
coraçón, si los buscares,
pienso que harto perdidos
con gran sobra de pesares.
5 Embiame acá el oýr,
porque mucho me conuiene,
7porque oya de quien los tiene
algunas vezes dezir.
Allá está mi pensamiento,
10 allá mi poca alegría
que perdí en mi vencimiento,
y todo el bien que tenía.
Si tú los pudieres ver,
mucho me los encomienda;
15 mas cata que no lo entienda
la que los tiene en poder.
Allá está mi libertad,
allá toda mi cordura;tiénelo en cargo bondad,
20 catiuólos hermosura.
La portera es honestad,
por la qual nunca podrás
hablar con quien tú querrás,
si no buscas a piedad.
25 Mas está tan encerrada
que si tú hablarla'speras,
tal será la tu tornada
que, antes que partas, mueras.
Si no buscas algún arte
30 como hables con quien quieres,
quanto enpiedad, no esperes
alcançar ninguna parte.
[Cabo]
Y dirás a la señora
que tiene toda essa gente
35 que soy presto toda ora
a su mandar y obidiente,
y qu'es vuelto a mi seruicio
vn público vassallage,
y mi fe en pleyto omenaje,
40 y mi penar en officio.
Cada vez que mi memoria
vuestra beldad representa,
mi penar se tornagloria,
mis seruicios en victoria,
5 mi morir, vida contenta.
E queda mi coraçón 3
bien satisfecho en seruiros;
el pago de sus sospiros
halo por buen galardón,
10 porque vista la memoria
en que a vos os representa,
su penar se torna gloria,
sus seruicios en victoria,
su morir, vida contenta.
Callé por mucho...
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