POEMAS
Fray Luis de León, “El aire se serena”
El aire se serena
y viste de hermosura y luz no usada,
Salinas, cuando suena
la música estremada,
por vuestra sabia mano gobernada.
A cuyo son divino
el alma, que en olvido está sumida,
torna a cobrar el tino
y memoria perdida
de su origen primera esclarecida.
Y como se conoce,
en suerte ypensamientos se mejora;
el oro desconoce,
que el vulgo vil adora,
la belleza caduca, engañadora.
Traspasa el aire todo
hasta llegar a la más alta esfera,
y oye allí otro modo
de no perecedera
música, que es la fuente y la primera.
Ve cómo el gran Maestro,
[a] aquesta inmensa cítara aplicado,
con movimiento diestro
produce el son sagrado,
con que esteeterno templo es sustentado.
Y como está compuesta
de números concordes, luego4 envía
consonante respuesta;
y entrambas a porfía5
se mezcla una dulcísima armonía.
Aquí la alma navega
por un mar de dulzura, y finalmente
en él ansí se anega
que ningún accidente
estraño y peregrino oye o siente.
¡Oh, desmayo dichoso!¡Oh, muerte que das vida! ¡Oh, dulce olvido!
¡Durase en tu reposo,
sin ser restituido
jamás a aqueste bajo y vil sentido!
A este bien os llamo,
gloria del apolíneo sacro coro,
amigos a quien amo
sobre todo tesoro;
que todo lo visible es triste lloro.
¡Oh, suene de contino,
Salinas, vuestro son en mis oídos,
por quien al bien divino
despiertanlos sentidos
quedando a lo demás amortecidos!
Oda compuesta por diez liras, estrofa de cinco versos y rima consonante introducida
por Garcilaso en España, aunque éste sólo la usara una vez, su esquema es 7a, 11B, 7a, 7b,
11B. Poema dedicado a su amigo el catedrático de música de la universidad de Salamanca,
Francisco Salinas.
TEMA: Admiración (amor) por su amigo, expresada en el éxtasis queproduce su
música en quien la oye.
ESTRUCTURA: Hay una gradación ascensional hasta la lira quinta, casi como si
fuéramos subiendo escalones en una escala mística y que alcanza el clímax en las estrofas
sexta y séptima, donde se mezclan las músicas terrenas y celestes, alcanzando el alma el
goce extremo; transportada, no oye ni siente nada que no sea la armonía.
En la 8ª se produce el anticlímax, quenos devuelve al mundo real:
bajo y vil sentido.
Y en la 9ª y la 10ª, ya en el mundo real, Fray Luis exhorta a escuchar la música de
Salinas a sus amigos, para alcanzar el bien divino a través de ella.
CONCLUSIÓN: Fray Luis de León, en esta oda de diez liras, armoniza el conjunto
de las teorías pitagóricas sobre la música de las esferas, el neoplatonismo renacentista y su
manejo horaciano declímax y anticlímax, para recrear con maestría su profunda
admiración, su amor, por Francisco Salinas, compañero suyo en la universidad de
Salamanca. Transportado por la música terrena del insigne catedrático, llega a un estadio
celeste, donde se funde esta música terrena con la música del Gran Maestro, que, según san
Agustín, es la que armoniza el Universo entero. Se produce una suerte de comuniónentre
ambas, expresada por fray Luis en unas estrofas centrales que pueden ser consideradas
como las únicas plenamente místicas de su poesía (un misticismo que él mismo se negaba).
Es una composición con poco aparejo estilístico, como para no estorbar la armonía
que desprende todo el poema, apenas los hipérbatos y bimembraciones de corte renacentista,
alguna metáfora, aliteraciones de vocalesabiertas y limpias, ajustadas al sentido, y unos
apóstrofes con oxymora finales que remarcan la polarización de las músicas que han llegado
a fundirse antes del anticlímax.
San Juan de la Cruz, La noche oscura
En una noche escura,
con ansias en amores inflamada,
¡oh dichosa ventura!,
salí sin ser notada,
estando ya mi casa sosegada.
A escuras y segura
por la secreta escala, disfrazada,
¡oh dichosa...
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