Poesias
Mh'nin a[eide, qeav, Phlhiavdew jAcilh'o"
oujlomevnhn, h{ muriv j jAcaioi'" a[lge j e[qhke,
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hJrwvwn, aujtou;" de; eJlwvria teu'cekuvnessin
oijwnoi'siv te pa'si, Dio;" d j ejteleiveto boulhv,
ejx ou| dh; ta; prw'ta diasthvthn ejrivsante
jAtreivdh" te a[nax ajndrw'n kai; di'o" jAcilleuv".
Canta, diosa, la funesta cólera del PélidaAquiles,
que trajo incontables sufrimientos a los aqueos,
y que arrojó al Hades muchas valerosas almas de héroes,
y los dejó como despojo para todos los perros y las aves de rapiña, cumpliendoel designio de Zeus,
desde que por primera vez se apartaron y disputaron el Atrida soberado de hombres y el divino Aquiles.
Homero
ENEIDA
Nuestra raza es resistente por su linaje,
Al nacernuestros hijos los llevamos a los torrentes,
Y en las heladas aguas los curtimos.
Nuestros muchachos esperan la aurora para salir de casa,
Y explorar los bosques;
Su diversión es manejar loscarros y los corceles,
Y disparar con el arco tenso sus dardos.
Pero pacientes en su trabajo,
Nuestros jóvenes acostumbrados a una vida sobria,
Con el rastro domeñan el suelo,
O bien en la guerra ,hacen temblar las ciudades.
-Virgilio
Del Rosal Vengo, Mi Madre
Del rosal vengo, mi madre,
vengo del rosale.
A riberas de aquel vado,
viera estar rosal granado;
vengo del rosale.
Ariberas de aquel río,
viera estar rosal florido;
vengo del rosale.
Viera estar rosal florido.
cogí rosas con sospiro;
vengo del rosale, madre,
vengo del rosale.
Juan del Encina
Amor, amor, unhábito vestí
Amor, amor, un hábito vestí
el cual de vuestro paño fue cortado;
al vestir ancho fue, más apretado
y estrecho cuando estuvo sobre mí.
Después acá de lo que consentí,
talarrepentimiento me ha tomado,
que pruebo alguna vez, de congojado,
a romper esto en que yo me metí.
Mas ¿quién podrá de este hábito librarse,
teniendo tan contraria su natura,
que con él ha venido...
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