Poetas hispanoamericanos
3 poetas hispanoamericanos
1.- Abigael Bohórquez (3) poemas
2.- Gustavo Adolfo Becquer (2) poemas
3.- Pablo Neruda (2) poemas
Y pos sus imágenes, datos bibliográficos y obras.
Abigael Bohórquez:
Nació en Caborca, el 12 de marzo de 1936
Murió en Hermosillo, el 28 de noviembre de 1995.
Obtuvo dos veces el Premio Clemencia Isaura, que se otorga en Mazatlán.
Fue unapasionado del teatro experimental.
Vivió durante mucho tiempo en el sur del país y publicó más de 18 libros de poesía y teatro.
Perteneció a la llamada Corriente Subterránea.
Según la crítica, su obra es clave para comprender la "renovación poética" de la literatura contemporánea en México.
Abigael Bohórquez fue uno de los primeros autores que habló de su homosexualidad, por lo cual seconvirtió en un caso mitológico y sus versos se leían en secreto. Es autor de libros como La madrugada del centauro, La hoguera en el pañuelo, Las amarras terrestres, Heredad, antología provisional.
Poemas:
Acta de Confirmación.
En la calle:
mil, dos mil, cinco mil estudiantes
exhiben sus testículos:
los muestran
dando enormes, duros, macizos gritos;
se los duelen al viento,
vociferan,y es que en algún sitio
de humana patria, el hombre está subiendo
por la tráquea del día
y de la noche, el agrio
peso de su dolor y de su hartura;
y piden largos filos,
abren toda su juventud,
hinchan su duelo,
están como altavoces de la muerte,
iracundos de amor,
ensalivados de pobreza;
y nada cabe en ellos,
sólo su solo y simple corazón,
violento mensajero,
que viajahasta donde los hombres
caen sobre sus zapatos y su sombra,
podridos hasta el tuétano;
pero sabiendo acaso que, en España,
en Caracas,
en Bogotá,
en Montevideo,
en Lima,
alguien,
alguno,
un joven, un poeta,
protesta y quema,
escribe,
encinta,
funda las residencias del desquite,
abraza con las manos furiosas las palabras precisas
en el verso,
en los muros.
en elurgente incorregible baratísimo impreso.
En la calle.
mil, dos mil, cinco mil estudiantes…
En ellos viene y va su cólera temprana,
sus apenas muchachos de la dura enemistad;
sus casi niños caídos de la rama,
pero nada es más grande,
más flor de varonía, que su puño,
su voz rajando muecas,
su grito todavía a flor del ángel;
porque ellos piden justificadas inauguraciones,desquites inaplazables,
manos sabiendo ser brazos abiertos,
mientras en otro sitio hay estudiantes
con las tripas al aire,
ametralladas mujeres, hombres duramente hostigados,
jóvenes dinamiteros,
muchachas lengua a lengua,
brazo a brazo en la ira,
pueblos que quieren, propios
su oxígeno y su sal,
su agua y su manta,
su cama y su mortaja,
por eso a media calle gritan losestudiantes,
silban,
manifiestan su pedrada y su herencia,
y yo me voy con ellos,
confirmo mi denuncia,
protesto por el sátrapa,
por el gran hijo de nadie,
para que el hombre
en cualquier parte del mundo
le chingue toda la madre al dictador,
al tirano, al chupavidas, porque uno como nosotros
exija sus derechos, pida sus garantías,
denuncie, mate, haga revoluciones,
canto y mevoy con ellos,
canto y espero todo lo que sea,
todo lo que me cueste,
pedir para los hombres la esperanza
porque somos, estamos hechos
con la misma sangre
y de la misma soledad
y en la misma intensa pura simple clara amarga
geografía,
porque estamos
pecho a pecho,
testículo a testículo,
en la misma doliente madrugada,
y nos cuelga todo mismo tamaño,
nos estremece todagana de muerte
para el que en alguna parte
estrangula sus sílabas de hombre,
ladre sobre sus consonantes presidiarias,
enmugrece las sábanas del mundo,
nutre y se deja nutrir negras ampollas.
Vámonos desde ahora, muchachos,
nadie debe callar, —pago mi precio—
si en otra parte
el hombre roba al hombre su garganta,
su casa, su esqueleto,
su lugar de pedir de ser habitante
de...
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