Política De Apaciguamiento
Espantados por los horrores de la Primera Guerra Mundial, como el conflicto más brutal conocido hasta 1914, no pocos políticos europeosdesearon mantener a ultranza la paz con la Alemania del Tercer Reich, sin importar las peticiones que dirigiera el agresivo régimen nazi, lo que significó permitir las constantes violaciones deHitler a los distintos tratados internacionales, como sucedió con la militarización de Renania, región occidental alemana donde el Tratado de Versalles en 1918 había prohibido a Alemania establecer fuerzasmilitares, arsenales o fortificaciones. Cuando Hitler envía en 1936 tropas de la Wehrmacht a estacionarse en Renania, Gran Bretaña se niega a protestar por esta ruptura del Tratado de Versalles. Sinapoyo británico, Francia acepta también sin queja alguna esta violación de dicho tratado. La política de apaciguamiento impide el mismo año de 1936 que Gran Bretaña y Francia impongan sanciones aAlemania e Italia por su intervención militar en la Guerra Civil Española, en contra de los acuerdos tomados entre estos países para no prestar apoyo bélico a los bandos españoles en pugna.
Similarsituación se vivió con la cuestión del rearme alemán llevado a cabo por el Tercer Reich desde 1933, a pesar de que el Tratado de Versalles establecía límites máximos de tropas para el Reichswehr (elejército alemán de la República de Weimar) y reducía muchísimo el alcance de la marina de guerra y la aviación militar germana. Ni Francia ni Gran Bretaña protestaron ante tal infracción, lo cual permitió aHitler organizar unas fuerzas armadas mucho más poderosas, la Wehrmacht.
En el caso de la anexión de Austria a Alemania (Anschluss) en marzo de 1938, Gran Bretaña y Francia tampoco protestaron por...
Regístrate para leer el documento completo.