politica
FRIEDRICH NIETZSCHE
AUTORES:
JOHANNA ANDREA ARIAS SÀNCHEZ
YOIDETH DORIA PETRO
AURA MARÌA LUNA GALVIS
LUIS CARLOS MARTINEZ ARCIRIA
PROFESOR:
LEONEL I. TORREGLOSA PEÑA
UNIVERSIDAD DE CÒRDOBA
FACULTAD DE EDUCACIÒN Y CIENCIAS HUMANAS
LICENCIATURA EN INFORMATICA Y MEDIOS AUDIOVISUALES
SEMESTRE III
MONTERÌA - CÒRDOBA
2014
PrologoCon unas gratas palabras de Goethe, tales como “Por cierto, me resulta odioso todo
aquello que solo me instruye, sin alimentar a su vez mi actividad o vitalizarme de forma
inminente.”Han de dar comienzo a nuestra consideración acerca del valor o no valor
del estudio de la Historia.
En esta contemplación se expondrá varios ítems como lo son, por que la instrucción sin
avivamiento, por queel conocimiento que hace languidecer la actividad humana,
porque la historia, considerada a modo de un lujo precioso y como la superfluidad del
conocimiento, debe resultarnos, según el proverbio de Goethe, seriamente odiosa. Por
cierto, necesitamos de la historia, pero la necesitamos de una forma distinta. Es decir
necesitamos de la historia para la vida y la acción, no para apartarnoscómodamente
de la acción o para venerar la vida egoísta, la acción cobarde y malversada, solo
serviremos a la historia en tanto ella nos sirva a la vida, pero existe un modo de
promover y valorar el estudio de la historia que conduce al deterioro y degeneración de
la vida.
Me he empeñado a describir una sensación que a menudo me ha atormentado: me
vengo de ella exponiéndola al conocimientodel público. Tal sensación no la he
percibido lo suficientemente pura y genuina y que en efecto no la he expresado con la
necesaria seguridad y madurez que proviene de la experiencia. Probablemente uno o
dos alegraran eso, pero la mayoría me dirán que se trata de una sensación equivoca y
sencillamente ilegitima y, que aun mas, a través de esta descripción me he mostrado
indigno deaquella poderosa corriente histórica que puede detectarse desde hace dos
siglos entre los alemanes. No obstante en que ose explayarme sobre la naturaleza de
mis sentimientos contribuirá al fortalecimiento de la prudencia general antes que se
deterioro, porque con ello, a muchos ofrezco la oportunidad de atribuir halagos a la
corriente histórica antes mencionada.
La presente consideración enintempestiva también porque cosiste en el intento de
comprender aquello en que nuestra época deposita un orgullo justificado, que es la
instrucción histórica como daño, falencias y defecto de la época. Por ellos creo que
padecemos de una fiebre histórica y que deberíamos reconocerlo. Sin embargo, visto
que Goethe ha dicho con aserción que nuestras virtudes cultivan a su vez nuestrasfalencias y puesto como es sabido, una virtud hipertrófica.
En mi defensa no debe soslayarse que las experiencias que me han proporcionado
tales sentimientos tortuosos has surgido de mi mismo y que solo me he servido de las
experiencias de otros con el propósito de enarbolar comparaciones. Sin embargo
encuentro que como filósofo clásico me compete tal procedimiento: no sabría definir
quésentido puede tener la filosofía clásica en nuestros tiempos si no el de proceder en
un sentido contrario al espíritu contemporáneo y, con ello, surtir un efecto sobre él y
los tiempos futuros.
Resumen
1
El hombre anhela en vano la dicha que según el poseen los animales, el animal vive de manera no histórica puesto que olvida en cada momento. El hombre solo en ocasionespuede negar su pasado ya que este es un ser histórico y no puede olvidar fácilmente su pasado, solo la muerte aporta el anhelado olvido. Por lo cual la felicidad es lo que ata al viviente a la vida, entonces no existe filosofo que puede reclamar para sí mismo justificativo que el cínico, la felicidad es olvidar y lo no histórico es no saber que es la felicidad y por consiguiente no saber...
Regístrate para leer el documento completo.