Popol Vuh

Mi trabajo muestra un gran nivel de ironía porque a pesar de estar todo el día intentando ser lo más observadora posible, no pude encontrar nada interesante hasta la noche. Después de estarenormemente frustrada por no lograr hallar ningún material para este proyecto decidí encerrarme en mi habitación con mi lámpara de mesa prendida y escuchando algo de música. Durante varios minutos (casimás de media hora) intente recordar algo de valor para mi trabajo, desgraciadamente esto fue en vano y nada parecía llegar a mis expectativas y peor aún: ni siquiera llegaban a expectativa alguna.Después de estos agobiantes momentos de estrés y un profundo sentimiento de fracaso estuve a punto de simplemente cobijarme y emprender el camino hacia el sueño, sin embargo justo cuando me levantedirecto para recoger mis sabanas (no muy lejos de mi cama) pude observar algo que atrajo toda mi atención y que aparentemente podría ser la llave para salir de tan desesperada situación: Una sombra.Así es, algo tan común y y simple fue la salvadora de esta interesante encomienda. La estuve viendo durante varios segundos hasta que finalmente todo mi ser se convenció que precisamente mi trabajotenía que ser sobre este fenómeno. ¿Y porque fenómeno? Simple: ¿Nunca has sentido ser diabólicamente observada? ¿Cada uno de los pequeños movimientos que se realizan, copiados exactamente ?Puesefectivamente así me sentía yo: observada, imitada, cada movimiento que realizaba representado exactamente. Las sombras son precisamente una copia del entorno que las rodea y en este caso aquel entornoera yo. Después de contemplar aquel dinosaurios, cual niña pequeña me puse a jugar con las sombra (haciendo perritos con las manos, dinosaurios, personas caminando y hasta mariposas) Esto con laintención de poder eliminar la presencia y la exactitud de las sombras, podemos ser capaces de manipularla y jugar con su precisión a la hora de copiar la profundidad de sus objetos. Todo esto me hizo...