Post-Pornografia.

Me comentó Bruce LaBruce en una entrevista que el hacía porno porque era lo que siempre había hecho, y era su forma de expresar ideas políticas, sociales o culturales mediante un formato sobre el que ha estado trabajando desde hace más de 20 años. También me dijo que la pornografía quizás sea uno de los únicos lenguajes que aun son capaces de transgredir, de ser radicales en esta sociedad.Probablemente tenga razón, en esta sociedad en la que todo es banal y nada perdura hay pocas formas de expresión tan mediáticas y tan radicales al mismo tiempo. Normalmente cualquier forma de resistencia política es hoy casi antigua, desvirtuada y marginal. Sin embargo el porno aun llega a un público masivo, desde su semilegalidad, cuestionando muchas de las normas impuestas. Hace unos días, a través deFacebook se proponía una alternativa a la huelga, en esta nueva forma de protesta se propone un día determinado para sacar al unísono en todo el globo el dinero del banco demostrando que aun tenemos control y fuerza como colectivo. Cada día es más evidente que la huelga y el sindicalismo son inútiles en un sistema que funciona a nivel global, con políticas locales que no tienen ningún controlsobre este nuevo orden dominado por grandes empresas privadas. De ahí viene que sea tan importante trabajar en esas otras estrategias que pueden plantear otros modelos y aun son efectivas, atacando directamente a los bancos o llegando al público desde su consumo diario de pornografía.

La pornografía, tal y como la conocemos, surge en Estados Unidos en los años sesenta. Así como anteriormente habíapertenecido a lo abyecto, a lo ilegal, a las clases más altas, desde la popularización de las cámaras de video amateur se ha convertido en una de las industrias más rentables e influyentes de nuestro tiempo. Hay que tener en cuenta que es consumida masivamente en la sociedad y construye nuestro imaginario sexual. Desde posiciones feministas se ha criticado ampliamente la pornografía, pues al serun producto machista ha potenciado el deseo del hombre por humillar, abusar y violar a mujeres que en el porno comercial se muestran sumisas y deseosas de ser forzadas. También ha sido muy cuestionado por impulsar un canon de belleza artificial donde la mujer es un mero objeto de deseo muy similar a una muñeca hinchable. Evidentemente no todo el porno comercial potencia estos comportamientosmachistas, pero si es cierto que la mayoría aún lo hace. Como producto que es, no hay que verlo como algo malvado, sino como un reflejo de carencias o características de una sociedad que lo produce. Es cierto, potencia estas carencias de manera abrumadora, las instaura en nuestra sociedad con nefastos resultados en los cánones de belleza y en nuestras pulsiones sexuales. Pero es posible construir otrasnuevas.

A partir de los noventa la pornografía es reconocida desde el mundo intelectual. No se puede cerrar los ojos durante más tiempo ante un producto que influye de manera tan radical y popular en la sociedad. Aparecen estudios, ideas y razonamientos. Desde círculos como el artístico se propone reutilizar el lenguaje de la pornografía para plantear tesis e ideas. Esto es lo que podríamosllamar post-porno. Esta corriente tuvo su punto álgido a finales de los noventa y en la primera década del siglo XXI. Teóricas como Judith Butler o Beatriz Preciado y artistas como Annie Sprinkle, Virginie Despentes o Bruce LaBruce, analizaron la pornografía y sus posibles usos, apropiándoselos para manipular el mensaje normativo y presentar otras posibles opciones. Aquí en España tuvimos unaimportante representación con las POST-OP u O.R.G.I.A. Desde estas plataformas, artistas relacionadas con corrientes feministas o post-feministas plantearon nuevos modelos pornográficos que criticaban el estado patriarcal y se acercaban a lo Queer. Esta corriente que comenzó desde el mundo homosexual, tanto lésbico como gay, ha ido mezclándose naturalmente con lo queer y lo trans y cada vez más...