Postmodernidad
Páginas: 5 (1041 palabras)
Publicado: 2 de junio de 2011
A. LA POSTMODERNIDAD: RUPTURA CON LA MODERNIDAD
La postmodernidad sería una completa ruptura con el proyecto de la modernidad. Ese proyecto puede resumirse en la voluntad de poder/dominación/enriquecimiento, a partir de la subjetivación del individuo blanco, occidental y cristiano y de la objetivicación de todo lo demás, ya sea sometiéndolo, destruyéndolo o haciéndolo espejo de looccidental. El otro -como puede ser la mujer, una cultura diferente, un pueblo distinto, la naturaleza- debe estar subordinado al imperialismo de la razón occidental, al poder del europeo o del norteamericano y a los intereses de su lectura del mundo. En la economía, el mercado, hoy mundialmente integrado, contituye una de las grandes contrucciones sociales d ela modernidad, junto con la razóninstrumental que dio origen al proyecto científico-técnico. El patriarcalismo, que marginó y oprimió a más de la mitad de la humanidad; el colonialismo, que prácticamente simetió a todos los uelos no blancos; y la agresión sistemática de la naturaleza sonotras tantas expresiones de la modernidad.
La postmodernidad quiere romper con esta cultura, por eso reafirma la diferencia, proclama el derecho a laexistencia del otro, insiste en la superación de todo binarismo (bueno y malo, blanco y negro, civilizado y bárbaro, etc). Ahora todo vale y tiene derecho a existir. Se acabó el logocentrismo, el eurocentrismo, el antropocentrismo, el patriarcalismo. Es el turno de la alteridad, la diferencia, la singularidad, que ya no deberán ser reprimidas, sino favorecidas. Ningún tipo de racionalidad debepretender el monopolio de la razón, sino al contrario: se hacen valer varios tipos de racionalidad autónomos e irreductibles.
B. LA POSTMODERNIDAD: REALIZACIÓN ÚLTIMA DE LA MODERNIDAD
Otros ven la postmodernidad como la continuación y la total realización de la modernidad. Es la consecuecia última del “retorno al sujeto”, propio de la modernidad.
En nombre de este protagonismo elindividuo, las utopías salvacionistas y totales deben ser descalificadas. Los adeptos de la postmodernidad las llaman metanarrativas (visiones universales). El iluminismo se presentaba, en primer lugar, como un programa de eduación de la humanidad, para que todos pudiesen ser adultos y autónomos; la Revolución francesa quería la ciudadanía y los derechos ralizados en todos los seres humanso; elcapitalismo pretendía generar abundancia para todos; el socialismo deseaba la redención de todas las alineaciones, partiendo del proletariado oprimido y dela inauguración del reino de la libertad social e individual. El judeocristianosmo pretendía traer un evangelio de rescate total del ser humano y de la creación, reconciliados en la sangre de Cristo, que nos trajo la paz con Dios.
Tales proyectosglobalizadores -afirman los críticos postmodernos- han conducido a guerras con saldos de millones de muertos. Las religiones salvacionistas terminan en terrorismo, en fundamentalismo y en guerras de religión. El cristianismo, en realidad, negó el cuerpo, “demonizó” el placer y rompió con la naturaleza; combatiendo al paganismo que tejía una relación positiva conotras realidades, eljudeocristianismo condujo a una ascesis monacal y predió la “fuga del mundo”. Por eso, como somos postmodernos, conviene también que seamos post-judeo-cristianos, que resucitemos un neopaganismo -se afirma especialmente desde 1975.
La tolerancia, junto con el pluralismo, es otro valor básico. Pero no la confundamos con el sentido que la modernidad (Lessing, Voltaire y otros) da a la tolerancia. Para losmodernos, la tolerancia partía de una lectura más profunda de la verdad objetiva. Esa verdad está ahí, en las cosas y en la historia. El acceso a ella es plural; sólo los caminos son múltiples. Todos contienen la verdad, que los contiene a todos. Por eso, la tolerancia para ellos era una forma de fidelidad a la verdad en sus múltiples facetas de descubrimiento y refelación. La tolerancia...
La postmodernidad sería una completa ruptura con el proyecto de la modernidad. Ese proyecto puede resumirse en la voluntad de poder/dominación/enriquecimiento, a partir de la subjetivación del individuo blanco, occidental y cristiano y de la objetivicación de todo lo demás, ya sea sometiéndolo, destruyéndolo o haciéndolo espejo de looccidental. El otro -como puede ser la mujer, una cultura diferente, un pueblo distinto, la naturaleza- debe estar subordinado al imperialismo de la razón occidental, al poder del europeo o del norteamericano y a los intereses de su lectura del mundo. En la economía, el mercado, hoy mundialmente integrado, contituye una de las grandes contrucciones sociales d ela modernidad, junto con la razóninstrumental que dio origen al proyecto científico-técnico. El patriarcalismo, que marginó y oprimió a más de la mitad de la humanidad; el colonialismo, que prácticamente simetió a todos los uelos no blancos; y la agresión sistemática de la naturaleza sonotras tantas expresiones de la modernidad.
La postmodernidad quiere romper con esta cultura, por eso reafirma la diferencia, proclama el derecho a laexistencia del otro, insiste en la superación de todo binarismo (bueno y malo, blanco y negro, civilizado y bárbaro, etc). Ahora todo vale y tiene derecho a existir. Se acabó el logocentrismo, el eurocentrismo, el antropocentrismo, el patriarcalismo. Es el turno de la alteridad, la diferencia, la singularidad, que ya no deberán ser reprimidas, sino favorecidas. Ningún tipo de racionalidad debepretender el monopolio de la razón, sino al contrario: se hacen valer varios tipos de racionalidad autónomos e irreductibles.
B. LA POSTMODERNIDAD: REALIZACIÓN ÚLTIMA DE LA MODERNIDAD
Otros ven la postmodernidad como la continuación y la total realización de la modernidad. Es la consecuecia última del “retorno al sujeto”, propio de la modernidad.
En nombre de este protagonismo elindividuo, las utopías salvacionistas y totales deben ser descalificadas. Los adeptos de la postmodernidad las llaman metanarrativas (visiones universales). El iluminismo se presentaba, en primer lugar, como un programa de eduación de la humanidad, para que todos pudiesen ser adultos y autónomos; la Revolución francesa quería la ciudadanía y los derechos ralizados en todos los seres humanso; elcapitalismo pretendía generar abundancia para todos; el socialismo deseaba la redención de todas las alineaciones, partiendo del proletariado oprimido y dela inauguración del reino de la libertad social e individual. El judeocristianosmo pretendía traer un evangelio de rescate total del ser humano y de la creación, reconciliados en la sangre de Cristo, que nos trajo la paz con Dios.
Tales proyectosglobalizadores -afirman los críticos postmodernos- han conducido a guerras con saldos de millones de muertos. Las religiones salvacionistas terminan en terrorismo, en fundamentalismo y en guerras de religión. El cristianismo, en realidad, negó el cuerpo, “demonizó” el placer y rompió con la naturaleza; combatiendo al paganismo que tejía una relación positiva conotras realidades, eljudeocristianismo condujo a una ascesis monacal y predió la “fuga del mundo”. Por eso, como somos postmodernos, conviene también que seamos post-judeo-cristianos, que resucitemos un neopaganismo -se afirma especialmente desde 1975.
La tolerancia, junto con el pluralismo, es otro valor básico. Pero no la confundamos con el sentido que la modernidad (Lessing, Voltaire y otros) da a la tolerancia. Para losmodernos, la tolerancia partía de una lectura más profunda de la verdad objetiva. Esa verdad está ahí, en las cosas y en la historia. El acceso a ella es plural; sólo los caminos son múltiples. Todos contienen la verdad, que los contiene a todos. Por eso, la tolerancia para ellos era una forma de fidelidad a la verdad en sus múltiples facetas de descubrimiento y refelación. La tolerancia...
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