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¿PAGARÁS EL PRECIO POR TU BENDICIÓN?
Salmos 42: 11 ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío.
Introducción:
Todos nosotros pasamos varias veces o por lo menos una vez por el proceso aplicado por Dios para el desarrollo de la fe y para la maduración espiritual. Es necesario en esos momentosaceptar, que Dios es real a pesar de lo que sintamos o pensemos en medio de la prueba, Dios nos entiende y quiere usar toda situación, para nuestro beneficio.
Dios nos entregó su Santo Espíritu y nos llenó de su lealtad, para que podamos mantener nuestra integridad como cristiano, pidámosle ayuda, aún sin sentir su presencia, pero confiando en su promesa, esforcémonos y venceremos la prueba ysaldremos de las dificultades para convertirnos en esa persona de confianza a quien el Señor mismo, pueda asignarle mayores y más nobles responsabilidades de las que tenemos ahora.
Desarrollo
EL SILENCIO PRUEBA NUESTRA MADUREZ
Dios para madurar nuestra relación con Él permite períodos de silencio, donde se experimenta una sequía espiritual, allí la duda embarga, es entonces cuando se ora y parece quelas oraciones rebotan en el techo, se ayuna y no sucede nada, reprendes al diablo, confiesas todos los pecados que te puedas imaginar, le pides perdón a Raimundo y a todo el mundo, se patalea, se llora… pero nada cambia… y nos preguntamos:
¿Por qué en la vida del creyente, a menudo, se presentan la prueba, la tormenta, y hasta cuadros de tragedia humana?
¿Es acaso necesario para el creyente,tener que atravesar el desierto?
¿La prueba, la tormenta, el desierto, llega exclusivamente por causa del pecado?
¿Puede llegar la prueba, por medio de Dios? ¿Por qué?
¿Es acaso posible transformar una prueba, en victoria?

Lo terrible de estos períodos de silencio es que sentimos que Dios nos abandonó, que se olvidó de nosotros y se encuentra a millones de kilómetros de distancia de nosotros,es entonces cuando el desaliento y el desánimo aparecen y el diablo, trata de aprovecharse de esta situación para alejarnos del propósito de Dios y comienza a bombardear con pensamientos negativos nuestra mente y coloca palabras tales como:
¿Cómo puedes mantener tu vista puesta en Jesús cuando tus ojos están llenos de lágrimas?
¿Cómo puedes mantener la esperanza, cuando Él no se comunicacontigo?
”Que malo es tu Dios, ¿Cómo se le ocurre guardar silencio cuando tú estás sufriendo tanto?”
¿Cómo puedes alabar a Dios cuando tu no entiendes lo que pasa en tu vida y para ñapa tu Señor no te lo explica?
“Has ya un parao a esta situación o Mejor vete a otra Iglesia o mucho mejor renuncia al ministerio”.
No pretendo tener las respuestas a estas preguntas, pero es necesario aceptar queDios conoce que cuando la vida del cristiano marcha de viento en popa, se hace más fácil adorarle, pero Dios también sabe que cuando las cosas se nos ponen color de hormiga, cuando Sufrimos, nos cansamos, nos perturbamos y somos objeto del dolor, tanto físico, como del alma, es la oportunidad para que Él se glorifique. ¿PAGARÁS EL PRECIO POR TU BENDICIÓN?


CUÉNTALE A DIOS CÓMO EN REALIDAD TESIENTES.
Derrama tu corazón ante Él. Suelta todas tus emociones y sentimientos eso fue lo que hizo Job 7:11 “Por tanto, no refrenaré mi boca; Hablaré en la angustia de mi espíritu, Y me quejaré con la amargura de mi alma”. Cuando tú te sinceras y hablas en tu lugar secreto con Dios, Él puede encargarse de tus dudas, temores, enojo y de las preguntas que tengas.
Job sabía que podía confiar enDios, porque Dios confiaba en Job. Job 13:15 “He aquí, aunque él me matare, en él esperaré; No obstante, defenderé delante de él mi camino Y él mismo será mi salvación” (…)

El rey David nunca blasfemó de Dios en público, pero en su intimidad nunca expresó un sentimiento que no fuera verdadero. Es posible confiar en Dios y al mismo tiempo estar afligido, dice David en el Salmo 116:10 “Creí; por...