presion de grupo
13 enero 2008
Ayer un familiar que vive con un gato me contaba que desde que una amiga suya se ha quedado embarazada ya no pisa su casa.
Por lo visto estachica no ha pasado la toxoplasmosis y le han dicho que no tome carne cruda o poco hecha y que evite el contacto con los gatos.
Su reacción es una muestra más del miedo irracional de muchas mujeres alos gatos cuanto están esperando un niño, y que se traduce en miles de abandonos todos los años.
Muchas veces causa de una mala información. En otras ocasiones es la excusa perfecta para deshacerse deun animal que ya empezaba a estorbar.
En realidad, no hay el más mínimo problema. Gatos y embarazadas son completamente compatibles.
Para aquellos casos en los que el problema sea la falta deinformación, aquí va la explicación:
La toxoplasmosis es una zoonosis (enfermedad que los animales pueden transmitir al hombre, o viceversa). Se trata de una enfermedad invisible, que un porcentaje muyelevado de personas padece sin darse cuenta y desarrolla sin mayor problema las defensas necesarias.
Los felinos son los únicos animales capaces de liberar las formas del parásito, llamado toxoplasmagondii, que contagian al hombre.
No obstante, en la práctica totalidad de los casos el contagio se produce al ingerir los quistes del parásito en la carne poco hecha, verduras mal lavadas, embutidoso huevos crudos.
El problema aparece cuando una mujer que no ha pasado antes esa enfermedad y por tanto no tiene anticuerpos queda embarazada, ya que en caso de enfermar el feto tiene un 40% deposibilidades de sufrir malformaciones.
Por eso muchas mujeres, cuando quedan embarazadas, se deshacen de sus mascotas. Algunas veces mal aconsejadas por sus médicos. Algo completamente innecesario.
Atodas las embarazadas se les hacen las pruebas de la toxoplasmosis si se demuestra que ya ha estado en contacto con el parásito, ya no hay de qué preocuparse. De no ser así, el riesgo de contagio...
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