Primera Parte
En la UE la población está envejeciendo, el tamaño de las familias se ha reducido y la unidad familiar se ha desinstitucionalizado, creando tensiones en las relaciones intergeneracionales. En los últimos años, la preocupación y el interés por el impacto social y económico de todos estos cambiossignificativos en el perfil demográfico de Europa han crecido como consecuencia de diversos hechos:
El índice de fertilidad a lo largo de la UE se encuentra por debajo del umbral necesario para renovar la población
Los bajos índices son resultado de diversos factores, incluyendo las dificultades para encontrar empleo, la falta y el coste de la vivienda, la edad más avanzada de los padres en el nacimientodel primer hijo, así como las distintas opciones de estudio, vida laboral y familiar
De modo que, como consecuencia de todo ello, el ratio de dependencia demográfico aumentará del 49% en 2005 a un 66% en 2030. Existen también otras cuestiones de peso, como si la inmigración puede ayudar a aliviar la caída de la población de la UE. Debido a esto, la UE ha prestado mayor atención a los serviciospara la primera infancia y la reconciliación entre las responsabilidades familiares y laborales. Las referencias a la EAPI en la agenda política de muchos países europeos son, frecuentemente, a través de acciones específicas en relación con cuestiones de población género o bienestar socioeconómico. Por ello, Existe una clara necesidad de ampliar el desarrollo de este análisis y uso de estas medidasen las discusiones sobre las políticas estatales en torno a temas como el género, los niños o la pobreza; también se sigue identificando una variación entre países que apunta a la existencia de una tipología diferenciada de modelos familiares en constante cambio.
Todas las sociedades europeas han tenido que enfrentarse con cambios radicales que han registrado los mercados de trabajo en lasúltimas tres décadas y están estrechamente relacionados con otra serie de cambios muy relevantes producidos tanto en la posición social que ocupa la mujer, como en las distintas formulaciones a propósito de la configuración de los Estados de bienestar, fundamentalmente en Europa. Asimismo, se considera que el contemporáneo Estado de Bienestar Europeo ha sido determinante para definir a las propiassociedades europeas, y que la idea de Estado de Bienestar ha experimentado la adherencia de ideas básicas socialdemócratas, constituyendo la esencia de sus contenidos y viceversa.
Con el debilitamiento económico de los Estados, muchos países han de enfrentar serios problemas presupuestarios. El problema radica en que, mientras que el desempleo constituye una preocupación política mayor y la economíafigura prioritariamente en la agenda política, otros ámbitos se vuelven menos proclives de ser controlados.
En el contexto actual de importantes transformaciones demográfico-familiares, aquello que se valora especialmente es la protección de los niños, en un intento de apoyar también los procesos de incremento de igualdad entre hombres y mujeres. Sin embargo, a pesar de los intentos desde losdiversos procesos de convergencia en el continente, las generaciones de políticas familiares no han sucedido del mismo modo ni con la misma intensidad en todos los países europeos. Parece necesario reconocer que las cuestiones sociales a las que aluden los Estados de bienestar son el resultado de la importancia que se les confiere en las diversas sociedades. La labor de promover el bienestar infantildemanda un foco más amplio que el propio niño en que se incluya también la familia. El alcance de los servicios de bienestar para la infancia disponibles depende de la definición que la sociedad haga de las necesidades de los niños; así como de la cultura y de los recursos de la comunidad en particular. Además, las dificultades de las familias y las necesidades de la infancia cambian a lo largo...
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