Principios rectores del procedimiento acusatorio

Principios rectores del procedimiento acusatorio

Introducción
Los principios rectores del sistema acusatorio adversarial se encuentran contemplados en nuestra Constitución federal, en las Constituciones de los Estados que han realizado las adecuaciones pertinentes a la reforma constitucional del mes de junio de 2008, en los Tratados Internacionales suscritos por México, concretamente el PactoInternacional de Derechos Civiles y Políticos y la Convención Interamericana de Derechos Humanos, así como en las diversas disposiciones de los Códigos de Procedimientos Penales de los Estados que han incorporado el sistema.

• Estos principios o normas rectoras deben ser fundamentos o criterios finalistas de orientación, interpretación y aplicación al caso concreto, por parte del juzgador,de los operadores del sistema y de la sociedad en general.

• Por lo anterior, es obvio que el sustento del sistema se apoya en los principios y valores acusatorios en el procedimiento penal, los cuales brindan un marco general de concepción, actuación, deber ser y hacer frente a ellos y definen la estructura del proceso, considerando en éstas las fases del mismo, el rol y perfil de cadauno de los participantes.

Fuente de los principios
Para estar en condiciones adecuadas que permitan entender el origen y la importancia de los principios rectores del procedimiento penal, es imprescindible traer a cita el origen de los derechos fundamentales que no sólo en materia punitiva ha tenido el gobernado, sino en todas las demás áreas de la ciencia jurídica, ya que precisamente la fuentede tales normas o reglas son los derechos fundamentales denominados erróneamente “garantías individuales”, pues precisamente de ellas emergen tales normas que actualmente constituyen el paradigma del derecho adjetivo penal, lo que, como ya apuntamos hace inevitable abordar el origen de tales derechos.

La fundamentación filosófica de las garantías individuales
De conformidad con la filosofía,desde que el hombre surge a la historia tiene un interés inherente a su naturaleza humana “tan constante como insaciable” a decir de Ignacio Burgoa “que lo conduce a realizar todo aquello que le produzca satisfacciones subjetivas y superación personal”, interés se traduce invariablemente en la búsqueda afanosa de su felicidad.

Así existen seres humanos que determinada conducta les produce unestado subjetivo de bienestar, misma que para otros provoca infelicidad; por ejemplo existen quienes el estudio de determinada área del conocimiento les genera una satisfacción personal que a su vez produce felicidad, en tanto que para otros esa misma actividad no les parece placentera, y les hace infelices; hay quien practicar determinado deporte les hace felices en tanto que otros consideran queese deporte es nefasto y lo repelen por crearles desdicha.

El delincuente, por ejemplo, es feliz delinquiendo, en perjuicio de sus semejantes, en tanto que el honesto lo es con un comportamiento que no afecte a sus congéneres.

Al empezar a realizar el hombre todo aquello que subjetivamente le causa un estado de dicha, acontece que su conducta afecta los derechos de las demás personas y esentonces que, según la filosofía, se hace necesario crear la norma jurídica como un instrumento necesario para regular la conducta entre los hombres, a fin de que al buscar su felicidad tenga un parámetro como límite a su actuación en esa búsqueda.

Pero, para la filosofía, surge otro problema; quienes aplican la norma jurídica, son igualmente seres humanos que obviamente también buscan sufelicidad y así, las pasiones que generan este estado anímico en tales seres humanos, se hacen presentes al actualizar la norma a casos concretos, lo que hace necesario, a decir de la propia filosofía, crear un mecanismo que vigile y regule la conducta de quienes ostentan el poder de aplicar la ley, siendo así que, para la ciencia de la sabiduría, surge el amparo como esa herramienta para tal...