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ESPAÑA Y EL PROBLEMA JUDÍO EN LA EUROPA DEL SIGLO XIX
ISIDRO GONZÁLEZ GARCÍA

El doctor en historia Isidro González García destaca por sus numerosas publicaciones sobre los judíos. En esta artículo Isidro trata la marginación y discriminación judía por culpa de habitar en Imperios como el Austrohúngaro y el Turco, que seguían el ejemplo del Imperio Ruso, el cual marginaba legalmentea los judíos con medidas como las limitaciones de la zona de residencia o las limitaciones en determinadas profesiones.
En el siglo XIX la exaltación romántica deriva en una exaltación del pueblo judío y un fuerte deseo independentista. Por un lado esta corriente se impone a una corriente de asimilación o integración por otras razas o pueblos, porque el deseo de la mayoría del pueblojudío era tener una nación propia. Este deseo se ve reflejado en dos obras transcendentales de la época para la literatura judía: París, Roma y Jerusalem (1859), de Yosef Salvador, y Roma y Jerusalem (1862), de Moisés Hess.
Principalmente, los judíos no se integraban ni eran asimilados por las naciones donde residían porque estas, debido a la exaltación patriótica del siglo XIX,intentaban buscar una razón contra sus males y un enemigo común. Esto derivo a un odio acérrimo de la gran mayoría de la población contra cualquier individuo judío y, por consiguiente, a un tinte antisemita en muchos intelectuales europeos. En Alemania con la creación de la Aldeutscher Verband en 1894, y más tarde en el Imperio Ruso con la creación de las centurias negras en 1905 es donde se da cabidaal mayor antisemitismo de Europa, aunque también los socialistas poseen un gran rechazo al pueblo judío. Finalmente, como consecuencia de los pogroms del sur de Rusia de 1881-1882, surgen las Tzivat-Sion Hovevei-Sion, que además de la labor defensiva inician las primeras emigraciones a Palestina (antiguo estado de Israel). Ya en 1882 aparece el primer libro sobre la formación del Estado Judío,Autoemancipación, de Leo Pinsker.
Con Teodhor Herzl y su obra Der Judenstadd (1896), el independentismo judío y el deseo de la formación y la asentación de un estado propio cobra forma. Esto lleva a un sinfín de reuniones, congresos, acciones diplomáticas, artículos periodísticos... que permiten llegar a la definitiva creación del estado de Israel en Mayo de 1948.

En Españaexistía también un gran sentimiento antijudío desde el edicto de expulsión de 1492. A lo largo de los reinados de Carlos III, Carlos IV y Fernando VII (además del gobierno de las Cortes de Cádiz) se intentan iniciar una serie de medidas para permitir la entrada de judíos en España, por su posible buen impacto en la economía nacional. Posteriormente, bajo el reinado de Isabel II, el rabinoPhilopson de Magdeburgo propone derogar el edicto de expulsión de 1492, pero eso no era necesario según el duque de la Torre, por lo que los judíos se podían instalar cuando quisieran. Posteriormente, en el sexenio democrático se produce un debate entre Castelar y Monterola donde se exponen las dos corrientes sobre el pueblo judío en España:
La primera es la corriente de la total aceptación de losjudíos. Esta corriente reconoce que fue un grave error la institución de la inquisición y la decisión de la expulsión de los judíos.

La segunda es la corriente del total rechazo a los judíos. Esta corriente justifica la Inquisición y se opone a la entrada de los judíos en España.

En España, el problema judío se enfoca desde la opinión pública, la política exterior y las corrientesintelectuales.
En la opinión pública hay tres corrientes que tratan el problema judío. La primera es la corriente liberal, encabezada por el gobierno liberal de Sagasta (sobre todo en 1881-1882) y periódicos como El Liberal, la cual propugna la repatriación de los judíos, su rechazo al antisemitismo, el error de la creación de la institución inquisitorial, y su aportación en la cultura...