profesor

Pontificia Universidad Católica
Facultad de Ciencias Sociales
Escuela de Trabajo Social
Pobreza y Exclusión Social











PRECARIZACIÓN LABORAL E INSEGURIDAD SOCIAL

Análisis de la degradación de las condiciones laborales desde el enfoque de la vulnerabilidad, el manejo social del riesgo y sus implicancias en el desarrollo humano

















En laactualidad, la mayoría de los países están expuestos a los impactos adversos de la coyuntura económica internacional, caracterizada entre otros aspectos, por la volatilidad de los mercados, el aumento de la informalidad laboral y el retiro del Estado en la provisión de servicios básicos, generando un sentimiento de fragilidad en los estratos sociales bajos y medios.1

En este escenario, lostrabajadores menos calificados se han visto desprotegidos de diversas maneras, incrementando la desregularización ya existente en el sector informal tradicional,2 donde el desempleo, la falta de protección social o la insatisfacción de necesidades, se transforman en una amenaza al bienestar físico y social de las personas.

Frente a esta situación, no es posible reducir la pobreza a unadimensión exclusivamente económica basada en la carencia de ingresos, pues esta concepción clásica no permite visualizar los problemas sociales de carácter complejo y multidimensional y por tanto, resulta insuficiente para responder a las demandas de mayor protección y seguridad que presentan las sociedades actuales.

Por este motivo, el presente ensayo tiene como objetivo analizar la precariedadlaboral desde la perspectiva del enfoque de vulnerabilidad y el manejo social de riesgo, para posteriormente examinar el rol que posee el desarrollo humano y el fortalecimiento del capital social en las políticas sociales destinadas a estos grupos.

En este sentido, la degradación de la condición laboral es una característica de la hegemonía del mercado donde se produce una separación entretrabajo y protección, una crisis de la regulación salarial y la instalación de la precariedad laboral. Este hecho genera una situación de gran vulnerabilidad social, afectando a los sujetos en su desenvolvimiento, ya que “para ser un individuo y jugar el juego de la autonomía, hay que tener un mínimo de garantías de protección.”3
Así, la modernización de la estructura productiva se ha caracterizadopor una mayor segmentación en los salarios, lo que ha producido un aumento de los niveles de desempleo abierto y oculto y de subempleo visible e invisible. De esta forma, la vulnerabilidad en los trabajadores con menos calificación –que en mayor medida pertenecen a los quintiles más bajos- puede ser comprendida como el riesgo o a la probabilidad de ser herido, dañado o lesionado ante cambios opermanencia de situaciones externas y/o internas.4

Esta vulnerabilidad en la condición laboral se puede expresar como fragilidad e indefensión frente al desamparo institucional del Estado, como debilidad interna para afrontar concretamente los cambios o como una inseguridad permanente que paraliza, incapacita y desmotiva la posibilidad de pensar estrategias para mejorar los niveles debienestar.5

Por tanto, la vulnerabilidad de los individuos posee dos caras: la cara externa de la exposición a los choques, a la tensión y al riesgo y la cara interna de la indefensión, es decir, la carencia de medios para hacer frente a una determinada situación sin sufrir pérdidas considerables.6

De esta manera, ante la volatilidad del ingreso, los hogares pobres pueden reaccionar de dos maneras:adoptar planes de producción o estrategias de empleo incluso si esto entraña un menor ingreso promedio y por otro lado, procurar suavizar el consumo creando reservas, sacando a los niños de la escuela y creando convenios informales de seguro y crédito. Sin embargo, ambos esfuerzos son ineficientes, ya que perpetúan la pobreza y no disminuyen el riesgo a través de estas acciones.7

Desde esta...