Profesor

EL VASCO ATOTXA y sus enseñanzas



Soy descendiente de vascos. Mi familia es una de las que siendo europeas, lleva mas tiempo en este continente. Según algunos registros, uno de mis ancestros viajó con Hernán Cortés, y desde entonces, jamás faltó un vasco en América.
En Lapurdi, cuando aún no se llamaba así, quedaban otros parientes a los que pasarían cinco siglos para que yo pudieravisitar.
Mi padre siempre reconoció su estirpe. Tenía parientes en San Agustín, donde nació, en Balcarce, y en Comandante Nicanor Otamendi. 
Cuando yo era muy chico era llevado por él a las fiestas vascas de aquellos chacareros paperos, donde nunca faltaban las partidas de mus, ni largas charlas libertarias.
Allí conocí a un vasco de apellido Atotxa, tendría unos setenta años y yo era un txiki(chico) de 8 o 9. Contaba unas historias geniales sobre mitología vasca. El las contaba siempre como cosas reales, y en mi imaginación, las dimensionaba de forma tal que soñaba con el momento de vivir esas aventuras.
Cada vez que mi padre me llevaba a pescar, yo miraba en derredor a ver si había un reflejo dorado... ¡El peine de oro de una Lamia! ¿Un movimiento en los pastos? ¡El Olentzero! Cada pezque capturaba miraba su color, no sea cosa que encontrase el pez hablador. Una depresión del camino... Podría ser la huella del Basajaun.
Cada vez que contaba una historia era diferente de la última vez. O se agregaba algún detalle, o el protagonista era otro. Pero la historia era realmente apasionante. Como yo no conocí a mi abuelo, creo que a esa edad, adopté a don Atotxa como abuelo.
Sucapacidad de sacar enseñanzas de la mitología era absoluta.
Ahora que lo recuerdo, a la distancia que los años generan, veo que he sido increíblemente rico. Tuve un abuelo que supo inyectarme el amor a la tierra de mis ancestros, sin olvidar que nací en la diáspora, que este país fue y es el cobijo no solo mío sino de tantos que (como él) tuvieron que encontrar en esta tierra, un lugar donde vivir ycontinuar su vida. Pero no en el desarraigo, sino en un nuevo hogar. No llorando la perdida de sus amigos de antaño, sino recordándolos con el cariño de siempre, pero poniendo en el amplio espacio de su corazón, a nuevos amigos que la vida le acercó y a cada uno supo darles el espacio que se merecía.
Siempre decía: “Somos vascos por vocación... Sí… Tenemos ese condimento que da el alma vasca, esesentimiento que debe ser demostrado en cada latido del corazón. Somos impulsivos, pero porque no podemos esperar a dar una opinión, porque queremos decir aquello que sentimos. Es posible que esto se haya colado en nuestros genes, por haber estado tanto tiempo oprimidos. 
El ansia de libertad de los vascos no tiene comparación con nada conocido. Hasta nuestras tradiciones tienen que ver con latierra, con el agua, el aire y el fuego: estimulación de los sentidos... Todo es importante y debe ser cuidado, protegido”. Y con una sonrisa continuaba: “¿Acaso los marinos vascos no pescaban en las costas de Terranova mucho antes de que Colon dijera que descubrió America? ¿Cual es la diferencia entre aquellos reinos que conquistaron el continente y los vascos? La diferencia es que los vascos notenían intención de conquista, ni de opresión, ni de esclavitud... Ellos solo querían estrechar vínculos, mostrar nuestra cultura, llevar bienestar.
Nuestra cultura es anterior a cualquier cultura europea, tanto que es muy probable que sea la madre de las culturas europeas. Los monumentos vascos tienen una antigüedad mayor a la de las pirámides egipcias”. Y avanzando en su exposición preguntaba: “¿Porqué los vascos no conquistaron mas territorios? Porque no los necesitaban, porque las Vascongadas eran todo lo que necesitaban, porque se respetaron siempre a los vecinos. Por eso los vascos cuando fueron arrojados a la diáspora, no tomaron para sí absolutamente nada, solo se integraron en la tierra que los cobijó e hicieron todo por mejorarla. En Argentina podríamos hacer una enorme lista de...