profesora de jardin de infantes

Espiritualidad del Catequistas a través de la Palabra

Ser Catequista, una vocación

Rasgos que configuran la vocación del Catequista:


Oración del Catequista
Llamados por Dios
Los llamados de Dios en la Historia...
Elaborar una pequeña reflexión para descubrir cada uno dentro de si, el llamado de Dios

Ser Catequista, una vocación

Todos los que estamos aquí en este grupo,estamos movido por alguna razón y eso es lo que vamos a descubrir esta tarde entre todos. Algunos somos catequistas y otros estamos en camino...Ahora bien, tenemos que tener claro que ser Catequista no es un voluntariado, ni una afición que me gusta...es algo muy importante para la persona de fe. Ser Catequista es una vocación y una Misión.

Ahora vamos a ir viendo, con la Biblia en las manos, laHistoria de la Salvación de Dios con el hombre. El llamado de Dios, desde Abraham hasta nuestros días.

Llamados por Dios
El Catequista es un hombre o una mujer que se siente llamado por Dios, desde lo más profundo de su corazón.

Dios hace el llamado a través de mediaciones:
A través de la Palabra
De un sacerdote
De un Catequista
De un amig@
La persona se siente invitado a colaboraren la Misión de Jesús.

La vocación del Catequista, es un Don y una llamada de Dios, un regalo que nos hace sin mérito alguno, a través de mediaciones y es una respuesta por parte del hombre.


Los llamados de Dios en la Historia: (adaptado del libro: La aventura apasionante de orar)
Dios se acerca al hombre y le llama por su nombre:
Abraham camina a pie descalzo, guiado por laPalabra de Dios, en la oscuridad de la fe. Es el modelo que nos propone la Sagrada Escritura en la obediencia de fe. Gracias a esta "fe poderosa" (Rom 4, 20), Abraham vino a ser "el padre de todos los creyentes" (Rom 4, 11. 18; Gn 15, 15).

Moisés: es el hombre que verá a Dios cara a cara, en la zarza que arde sin consumirse, quien encuentra con Dios en el desierto, se descalza para comenzar unanueva vida. El que sube al monte y ve a Dios que pasa como amigo y recibe la ley, el maná y el agua viva. Ese hombre que entra en la tienda para orar y arranca al pueblo de la esclavitud. El hombre que llega a la tierra prometida sin pisarla. (Ex 3, 1-15)

David: el hombre que Dios escoge como amigo, capaz de lo grande y lo bajo. Abre su corazón a Dios en alabanza y le grita su pecado: “Dame, ohDios, un corazón puro y fortaléceme con espíritu firme”. David es el eslabón que marca la presencia de Dios con fuerza.

Aquí está el último de los profetas. No es Elías, el hombre del desierto que experimenta el paso de Dios. NO es Jeremías, el hombre que se siente seducido por Dios. No es Daniel, el hombre que sabe leer el corazón de los hombres desde joven. Es Juan el Bautista. El queanuncia el camino del Señor. Juan viste piel sobre piel, se ha hecho desde joven en el silencio y soledad del desierto. Se esconde, porque viene otro mayor: Jesús de Nazaret. (Con Juan el Bautista se cierra el A.T. y con Jesús se abre el N.T).

María la mujer sencilla. Vive en soledad. Y Dios se le entra de puntillas y la virgen se hace madre. La que guarda todo en su corazón. La mujer decidida antela noche del nacimiento de Belén. Y la mujer fuerte, al lado de la cruz, donde su hijo muere como un maldito.

Los Apóstoles, Juan, el discípulo Amado, el contemplativo. Pedro, derrochando vitalidad…Mateo, el que cambia la vida... Zaqueo, el que baja. La Samaritana, la que deja el cántaro de barro porque ha encontrado dentro un agua viva. Y María Magdalena, que se queda con la mejor parte.Los Santos: San Agustín, San Francisco de Asís, San Juan de la Cruz…Santa Teresita de Jesús entre tantos otros…

Nosotros, los cristianos de hoy, tenemos que entrar en esa pedagogía de Dios que marcó a esos hombres, en ese ritmo de amor y oración, de entrega y servicio.
Espiritualidad del Catequistas

Ser Catequista, una vocación

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