profesorado de historia

En la noche del 16 de septiembre de 1976, un grupo de estudiantes secundarios de La Plata fueron secuestrados de sus casas por luchar por el otorgamiento del boletoestudiantil. La mayoría de ellos pertenecía a la Unión de Estudiantes Secundarios y había encabezado, un año antes, una serie de marchas ante el Ministerio de Obras Públicas de la provinciapara la obtención del descuento en el costo del transporte. El hecho, denominado La Noche de los Lápices, quedó como un símbolo del terrorismo de Estado contra la militanciapopular.
Los secuestros fueron realizados por el Batallón 601 del Servicio de Inteligencia del Ejército y por la Policía de la provincia de Buenos Aires, dirigida en ese entoncespor el siniestro Ramón Camps, uno de los ideólogos fascistas más importantes de la dictadura. En el operativo cayeron Claudio de Acha, Gustavo Calotti, María Clara Ciocchini,Pablo Díaz, María Claudia Falcone, Francisco López Muntaner, Patricia Miranda, Emilce Moler, Daniel Racero y Horacio Ungaro.
De todos ellos, sólo cuatro sobrevivieron, entre ellosEmilce Moler y Pablo Díaz. Este último fue quien hizo conocer todos los hechos durante el Juicio a las Juntas en 1985. En el Informe de la CONADEP, se destaca que la dictaduraconsideró a la lucha por el boleto estudiantil como “subversión en las escuelas”. En 1999, la Legislatura de las Ciudad Autónoma de Buenos Aires estableció, en homenaje a lasvíctimas de La Noche de los Lápices, al 16 de septiembre como el Día del Estudiante Secundario. Los trabajadores telefónicos recordamos a las víctimas de aquel hecho atroz, yreivindicamos el derecho de todos los estudiantes a comprometerse en política, poder ejercer la militancia, y luchar desde su lugar en las escuelas por una sociedad más justa.