Prostty Mayor
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* | "El Cascanueces y el Rey de los Ratones"es un asombroso cuento de E.T.A. Hoffman, ese fascinante prestidigitador que tenía como vocación ser compositor y, aunque no lo logró, alcanzó paradójicamente el mérito de quealgunos de los mejores compositores del XIX buscaran inspiración en sus obras para componer deliciosas melodías. "Cascanueces" dio lugar al precioso ballet de Tchaikovski, "Losautómatas" al no menos alegre ballet "Coplería" de Leo Delibes, y la ópera "Los cuentos de Hoffman" es lo mejor de Off Bach.
Delicioso es el cuento de "Cascanueces", en el que un padrinorelojero cuenta a la pequeña María el "Cuento de la nuez dura". A partir de él, se mezcla ficción con realidad y la soñadora niña será testigo de la batalla entre el muñecoCascanueces, príncipe de todos los dulces y del país de Mermelada, y el cruel Rey de los Ratones, vengativo amigo de lo ajeno. La anécdota acaba siendo lo de menos, ya que lo importante delrelato es desvelarnos o recordarnos lo maravilloso que es imaginar y soñar. Más que jugar, María sueña despierta y su fe en la fantasía acaba recompensada.
Al fin y al cabo,ahora que se venden tantos videojuegos y juguetes electrónicos, no es banal considerar que el mejor juguete es aquel, absolutamente sencillo, que estimula la imaginación. De hecho, estecuento comienza en Nochebuena y lo desencadena el regalo que el padrino hace a María: el feo muñeco Cascanueces, cuya apariencia engañaría a cualquiera, pero no a María, no a unniño que sepa soñar.
Aviso: este cuento de Navidad no es apto para golosos. Lo digo porque ha estimulado no sólo mi niñez, sino también mi glotoneríaFinal del formulario |
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