Prueba Del Libro El Castillo Negro En El Desierto
CARMEN CAAMAÑO
Maestra. Licenciada en Lingüística.
Docente universitaria
Publicado en la Revista de la Educación del Pueblo Nº 89 (Aula, Montevideo, 2003)
Hasta poco tiempo atrás el tema de la evaluación era recurrente a finales del curso. Hoy se entiende que la evaluación debe acompañar todo el proceso para que la enseñanza sea máseficaz.
A parir de esta idea, la Licenciada Carmen Caamaño enriquece los análisis y las propuestas de evaluación en torno al lenguaje.
La cuestión de la ‘evaluación’ es objeto de diversas y constantes controversias en el campo educativo. En general las opiniones en torno a la misma suelen polarizarse adoptándose actitudes de tipo pendular: se la desvaloriza totalmente o se la sobredimensionaen exceso.
Sin embargo, no siempre se suelen esgrimir argumentos educativos y técnicos verdaderamente relevantes como para adoptar tales actitudes. Algunas tendencias educativas ven la evaluación como un hecho secundario que poco o nada tiene que ver con el proceso que implica un verdadero aprendizaje y este desconocimiento trae aparejado una serie de problemas, sobre todo con relación a laposibilidad de análisis y retroalimentación de la propia labor educativa.
Otras perspectivas sobredimensionan en tal forma la evaluación que la misma queda desvirtuada puesto que termina siendo el objetivo o meta final de la educación, lo que lleva a que se la valore ‘per se’.
A veces, la discusión acerca de la evaluación se centra en cuestiones parciales tales como evaluar solamente losprocesos o solamente los productos, considerando estas dimensiones en forma dicotómica y excluyente, sin tener en cuenta que focalizarla en uno u otro de estos aspectos (e incluso en los dos simultáneamente) dependerá del objetivo que se busque con dicha evaluación.
A pesar de estas discusiones, muchas veces se deja de lado lo fundamental, lo que no puede perderse de vista cuando se trata deevaluar y ello es la meta primordial que debe cumplir la evaluación: dar cuenta de lo que está sucediendo con el aprendizaje que es objeto de análisis evaluativo, con el fin principal de ofrecer los insumos diagnósticos imprescindibles, ya sea al sistema, a los centros educativos, a los propios docentes de aula e, incluso, a la sociedad en su conjunto, para mejorar y/o potenciar ese aprendizaje. Dichos insumos permitirían:
• planificar apropiadamente tanto las políticas educativas de un país como la labor pedagógica concreta de un centro escolar y de un aula;
• diseñar estrategias didácticas pertinentes;
• emplear herramientas y recursos apropiados; etc.
Toda evaluación debería tener como fin revertir y/o potenciar situaciones educativas, buscando mejorar elaprendizaje, mejorando, al mismo tiempo, la enseñanza.
La cuestión planteada con respecto a la evaluación se extiende a todas las áreas disciplinares, pero, en este artículo, se pretende reflexionar acerca de algunas cuestiones que están directamente relacionadas con la importancia que adquiere la evaluación cuando se quiere potenciar el área del lenguaje. La idea es reflexionar acerca de estetema con el fin de ayudar a los docentes a considerar y a valorar la evaluación de esta área del conocimiento en su justa medida.
En principio, es fundamental tener presente que, si bien es importante que cada establecimiento escolar planifique cuidadosamente sus propias formas de evaluar y que cada docente haga lo mismo para sus alumnos, no es menos cierto que es necesario contar conciertos parámetros o estándares que ofrezcan una visión panorámica más general acerca de lo que está sucediendo en un nivel más macro (una comunidad similar, un país, una región, etc.). Por ello, en la evaluación, tanto institucional como de aula, es necesario poder considerar y poder interpretar lo producido por los alumnos, con una perspectiva que vaya más allá de los contextos inmediatos (aula y...
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