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Piedra Colgada
Y otros cuentos
TUSSEL CABALLEROS IGLESIAS
COPIAPO
2014.Piedra Colgada y otros cuentos
Tussel Caballero Iglesias
Agrupación de Libreros de Atacama: Ejecutores
Graciela Núñez Valenzuela. Presidenta.
Inscripción Derecho de Autor Nº ……..
ISBN.: ………………………
Digitado: Tussel Caballero
Diagramación: Damián Fuentes EscobarFotografía Portada: Tussel Caballero
Patrocina: Gobierno Regional de Atacama, 2% Cultura
GORE Atacama. 2014.
Impresión: impresos Tamarugal
Chañarcillo 461- Teléfono 56-52-2214003
Correo Electrónico: contacto@impresostamarugal.cl
EDITOR: Eduardo Aramburu García
PrólogoEL AS DE ESPADA
El hombre recogió las cartas que el repartidor del juego le entregó. Las golpeó contra la mesa y fue descubriéndolas una a una, primera fue un as de trébol que floreció en sus manos, después un as de corazón. rojo sangrante y la tercera, el rojo carmesí de una as de diamante. Además, dos cartas que no tenían ningunarelación con los tres ases. Las manos le sudaban, pero ni un gesto externo reveló lo que tenía en sus manos. La emoción de esa papa caliente que le quemaba le aseguraba un hermoso juego de primera mano, debía pasar desapercibido para el resto de los jugadores. Todos eran duchos y asiduos concurrentes a las noches de póquer y no jugaban por simple afición o por matar la noche: jugaban en serio,porque corrían grandes cantidades de dinero, algunas doradas pellas de oro, algunos kilos de plata pura de Chañarcillo o de Tres Puntas, las infaltables prendas personales, como relojes, colleras, prendedores de oro, alguna mina o mansión que caía en el envite.
El hombre de los tres ases miró a sus contrincantes: Siempre los mismos; estaba don Ismael Reinoso dueño de importantes puntosmineros, incluso tenía uno en Tres Puntas, ganado a fuerza de coraje, cabalgando duramente el día que supo que se había descubierto una veta en ese cerro cercano a Chimberos, ese día prácticamente no quedó nadie en Copiapó, todos viajaron presurosos, por cualquier medio, para hacerse de una veta en ese generoso cerro, que prometía más plata que Chañarcillo. Después de ese día, daba pena transitarpor los lugares donde se abrió el camino; estaba lleno de carretas destrozadas, de caballos, mulares y burros, muertos de cansancio, cortados por el esfuerzo de llegar a la cumbre y tener un punto para trabajarlo. Estaba don Nazario, dueño del emporio más surtido de Copiapó. En su negocio, vendía de todo, desde agujas hasta complicados winches mineros, pasando por ollas, lámparas, cocinas, teteras,ropa de trabajo, abarrotes, en suma, había en su negocio de calle Chañarcillo, todo lo que el minero necesitaba para sus minas, en la calle, unos rieles enterrados indicaban el sitio donde las carretas se aculataban, para descargar la mercadería que llegaba en los trenes, o para cargar los pedidos para las diferentes minas que atendía. Otro frecuente jugador, era don Mariano, que vivíaprácticamente de las minas y los mineros. Era habilitador, personaje importante en esa época, era el hombre que ponía el dinero para cualquier faena que se instalaba, el ponía todo, herramientas, víveres, transporte. En la bajada de la remesa, se pagaba de todo lo que había puesto, claro que con jugosas ganancias. El no trabajaba, lo hacía su dinero. Tampoco faltaban los tahúres profesionales, los queno trabajaban en ninguna cosa y esperaban la oportunidad que les cayera algunos pesos. Venían también los dueños de algún negocio de licores, de algún prostíbulo que intentaban llevar a su negocio algún jugador con suerte. Pero, por lo general, los más asiduos eran los dueños de prósperas minas, que queriendo entretener sus noches, venían a buscar en las cartas de los naipes, una entretención...
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