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Psicoanálisis silvestre
Se comienza con el relato del caso clínico de una dama que se presentó en el consultorio de Freud en compañía de una amiga en papel de protectora, mujer de mediana edadalrededor de los cuarenta y cinco y cincuenta años, la cual sufría de estados de angustia. La razón del problema fue la separación de su último esposo, pero mencionó que la angustia fue más grandedespués de consultar a un joven médico en los suburbios, quien le dijo que la causa de su angustia era la privación sexual que ella tenía, las alternativas dadas eran volver con el esposo, conseguir unamante o satisfacerse sola. Esto no podría llevarse a cabo ya que la religiosidad y moral de la dama no se lo permitía. Ella acudió con la idea de que el médico anterior estuviese equivocado. Una delas conclusiones de Freud en base al argumento de la mujer fue el de inculpar al médico colega con un informe desfigurado. Cualquiera hubiese criticado el informe del médico al hablar de sexualidadcon la señora al no hacerlo con tacto y consideración. Freud se puso a analizar minuciosamente el informe del médico, al examinar el concepto de lo sexual comprende en el psicoanálisis mucho más, quesobrepasa el sentido popular en ambas direcciones. Se toma en cuenta a la vida sexual como todo quehacer de sentimientos que brote de la fuente de las mociones sexuales primitivas, aunque éstasexperimenten una inhibición de su meta originalmente sexual o la hayan permutado por otra que ya no es sexual. Se tomó en cuenta la idea de que los neuróticos pueden delatar de esta forma sus fantasíaspatógenas. Quien no comparte la concepción de sexualidad mencionada anteriormente no merece invocar principios doctrinarios del psicoanálisis que tratan de la significatividad etiológica de lo sexual. Losconsejos del médico produjeron un malentendido, aún más enojoso. Es cierto que según el psicoanálisis una insatisfacción sexual es la causa de las afecciones neuróticas. Aunque no todo caso...