Psicologa
En algún momento creo que todos nos hemos preguntado: “¿Por qué me tocaron estos hijos ¿ ¿ Por qué estamos juntos comofamilia ¿ ¿ Acaso es un accidente, una mera casualidad ¿ O ¿ es que tengo qué aprender de ellos y ellos algo de mí?”
No creo en los accidentes, ni en lascasualidades. Elegimos aprender unos de otros y la familia es nuestro salón de clases. La convivencia es nuestro libro de texto, que vamos escribiendo y revisando díacon día. Algunas lecciones las reprobamos y entonces las tenemos que repetir. La vida es generosa y nos da muchas oportunidades para pasar las pruebas que nos pone.Cada persona tiene su tarea particular. A veces nos asesoran los que ya se saben la lección y con paciencia nos explican una y otra vez. En algunas ocasionesestamos dispuestos a escuchar y comprendemos con facilidad; pero en otras se nos nubla el entendimiento, y lo que para todos es obvio, para nosotros resultaincomprensible.
Algunos escogemos aprender con amor y alegría, otros con dolor y sufrimiento. Pero al final de nuestras vidas tenemos que reconocer que fuimos nosotrosquienes escogimos las lecciones que ahí estaban para que aprendiéramos de ellas. Algunas las aproveché, otras las ignoré, pero finalmente yo he creado mirealidad.
Gracias a mi libre albedrío he podido elegir, ya sea quedarme en la ignorancia o en la inconciencia, o crecer y evolucionar. Termino por darme cuenta de que loque he hecho de mi vida ha dependido sólo de mi. [pic]
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