Psicologia del niño - j.piaget - capitulo iv

Psicología del Niño
J.Piaget – B. Inhelder

Capítulo IV

Las Operaciones Concretas del Pensamiento y las Relaciones Interindividuales


Introducción

Ya desarrollados los primeros esquemas senso-motores, a partir de uno y medio a dos años de edad, podría esperarse que la función semiótica bastara para permitir una interiorizacióndirecta y rápida de las acciones en operaciones.
La constitución del esquema del objeto permanente y la del grupo práctico de desplazamientos prefiguran, en efecto, la reversibilidad y las convenciones operatorias que parecen anunciar la próxima formación. Pero hay que esperar aproximadamente hasta los 7 u 8 años y se trata de comprender las razones de ese retraso si es que se quiere captar lanaturaleza compleja de las operaciones.

I – LOS TRES NIVELES DEL PASO DE LA ACCION A LA OPERACIÓN

La presencia de ese retraso demuestra la existencia de 3 niveles.

En el comienzo esta el nivel senso-motor de acción directa sobre lo real, luego el de las operaciones concretas, que afectan las transformaciones de lo real, pero por acciones interiorizadas y agrupadas en sistemas coherentes yreversibles (reunir y disociar, etc.), y entre ambos hay, de dos-tres a seis-siete años, un nivel que no es de simple transición, porque si se halla en progreso sobre la acción inmediata, que la función semiótica permite interiorizar, esta señalado por obstáculos serios, dado que hacen falta cinco o seis años para pasar de la acción a la operación...

¿Cuales pueden ser esos obstáculos?Primero hay que considerar que un logro en acción no se prolonga, sin más, en una representación adecuada. Desde los uno y medio a los dos años, el niño está en posesión de desplazamientos, que le permite idas y venidas.

Se ha visto en niños de cuatro a cinco años que recorren solos un trayecto de su casa a la escuela y a la inversa. Pero si se les pide que representen ese trayecto mediante unconjunto de objetos o que indiquen el mismo en un plano, no logran reconstruir las relaciones topográficas que utilizan en acción, es decir que sus recuerdos son motores.

El primer obstáculo para la operación es, la necesidad de reconstruir en ese nuevo plano de la representación lo que ya estaba adquirido en el de la acción.

En segundo lugar, esa reconstrucción entraña un proceso formadoranálogo descripto en el plano senso-motor: el paso de un estado inicial, en el que todo esta centrado en el cuerpo y la acción propios, a un estado de descentración en el que estos están situados en sus relaciones objetivas con relación al conjunto de los objetos. Pero esa descentración es difícil en la representación por ser más extensa y mayor complejidad.

En tercer lugar, el lenguaje y lafunción semiótica permiten la comunicación, el universo de la representación no esta formado solo por objetos, sino igualmente de sujetos, a la vez exteriores y análogos al yo, por ello supone perspectivas distintas y múltiples que se tratará de diferenciar y coordinar, es decir que la descentralización necesaria para desembocar en la constitución de la operaciones no recaerá sobre un universos físicosino también sobre un universo social.

Las operaciones implican siempre una posibilidad de intercambio de coordinación individual y social; y ese aspecto cooperativo constituye una condición de la objetividad de la coherencia interna y de la universalidad de esas estructuras operatorias.

Las construcciones y la descentración cognoscitivas son inseparables de construcciones y de unadescentración afectiva y social.

El término social se trata de un proceso interindividual de socialización a la vez cognoscitivo, afectivo y moral.
El periodo preoperatorio que va hasta los siete u ocho años, no es mas que un periodo de organización y de preparación, comparable a lo que son los estadios I, II y III o IV del desarrollo senso-motor, mientras que el periodo de los siete-ocho años...