psicologia

Aguafuerte

Ser Escritor Tulio Galantini.

Cuando Abelardo Castillo y su hermosa mujer Sylvia Iparraguirre me recibieron en su casona de Buenos Aires, no pude menos quesonreírme cuando me dijo que me agradecía la invitación pero no entendía los Encuentros de Escritores. No comprendía el fin de la propuesta. Ahí es cuando me di cuenta que coincidíamos, no tenía unarazón valedera para la invitación. Entonces, deslicé, vengan a conocer el mar y el río. -¿Y porqué me invitás?- me dijo. Porque usted es un buen escritor, contesté. Le confieso, Castillo, que sabía que noiba a aceptar la invitación. -¿Y porqué viniste?- Para conocerlo, tomar un café con usted y su mujer. Admiro a los escritores por las mujeres que tienen al lado, mucho más que por lo que escriben.Dos escritores juntos, estimulan mi curiosidad.
¿Y vos, sos también un escritor? No, le digo, yo escribo de vez en cuando, fumo en pipa, pero no soy un escritor. Leí su libro “Ser Escritor”, y meparece que los escritores son grandes lectores, que cuando se cansan de leer empiezan a escribir.
Estoy escribiendo unos Aguafuertes en el diario y voy a transcribir parte de lo que usted escribió, sime lo permite. Esa tarde, me fui con la mirada cálida de una mujer que narró la Patagonia con asombro y con la lucidez implacable de Castillo, que escribió:
“La literatura nace de una fuerte tendenciaa la incomunicación. Un escritor de ficciones es alguien que en la vida cotidiana raramente puede comunicar lo que siente: sus miedos, sus pasiones, su amor. Es algo así como esa mirada de sorpresaante lo real de que hablaban los griegos, lo que al escritor le permite escribir. El único lugar donde un hombre que escribe se comunica es en sus libros, y son sus personajes quienes hablan por él.Los escritores en general, son grandes tímidos. Tal vez porque saben que los sentimientos más profundos solo pueden manifestarse con palabras triviales. De qué modo decir “te quiero” o “estoy...