Psicologia

Taller de Expresión I- Cátedra: Klein- Panpillo - Comisión nº 15 Nombre: Nancy Fleita


• A partir de “Diez minutos”: Ir a un lugar de la ciudad (plaza, biblioteca, bar, peluquería, subte, etc) permanecer en él un tiempo, observar, elegir a alguien. Imaginar una escena que lo tenga como protagonista y narrarla desde su perspectiva. Interrumpir la escena en el momento de mayor tensión.Proponer varios finales sin concluir el relato.


La llegada

Los manos en los bolsillos resisten al frío mientras esperan que el semáforo cambie. El sol está mas arriba, pertenece a algunos pocos privilegiados por el horario a los pisos sextos y séptimos de los edificios. Esos siempre se roban el sol. El gentío que va y viene. Parece saber donde se dirige: Sabe de dónde viene y dónde va allegar. Tan perfectamente escrito en los libros de la rutina que asusta.
Tiene el pelo negro y flequillo que vuela en su frente por el viento. La mirada inquieta y despistada de un chico. Carga un morral grande, tipo india, de telas de colores y algunas lentejuelas. Avanza con pasos firmes. En ella hay un aire relajado en sus modos y en su cara una chispa que grita algo como rebeldía. Sin duda ellaentra y su llegada produce una exaltación en el clima del lugar. Esto se explica, en primera instancia, por el tipo de puerta que debe atravesar: es de madera, que ahora luce hinchada por la humedad de la ciudad; con por lo menos tres recuadros de vidrios al estilo antiguo, tal vez con bisagras faltas de lubricación. Por lo tanto se produce un chirrido particular el silbido de la bisagra enmovimiento, la madera hinchada que intenta la resistencia al empuje, los vidrios que vibran por el arrastre de la puerta. Un perfecto escándalo, ya que perturba el clima del ahí dentro recordándoles que hay un allá fuera. Ahí aparece ella. En ese instante no hay quien no cabecee de algún modo para ver quién entra. De este modo la llegada es algo que se anuncia como si sonara una trompeta desde algúnlugar secreto. También se anuncia con cierta anterioridad sutilmente, mucho antes de empujar la puerta. Habrá fijado la miradaen el lugar poco antes de cruzar la calle. Habrá recorrido el lugar con la vista para ver si había mucha o poca gente, si había alguna mesa cerca de la ventana, si estaba suficientemente iluminado. Habrá dudado, y por tanto habrá mirado alternativamente en busca derespuestas. Pero ahí está sola, tal vez se avergüense por esto, ya que ya habrá visto una mayoría de mesas ocupadas de a dos o más, ahí está lo mismo a punto de cruzar el umbral. Apenas se sugiere el aroma a café y medialunas además de la ligera percepción del calor de la calefacción al otro lado del vidrio, ella se relaja. No tiene más que empujar, no es ese momento de vacilar. Ella empuja para lograrentrar, lo cual recordemos que es un escándalo que perturba por el ruido completamente ajeno al coro armonioso y perfecto que forma el murmullo de los comensales, la máquina de café, el sonido de las tazas y platos aquí y allá. El sonido perturbador se produce. Todos levantan una pestaña, la mirada o estiran el cuello de algún modo para notar al desconocido que lo produce. Ella se avergüenza otra vezpero el embrujo del aroma y la temperatura la relajan otra vez. Ya sus dos pies pisan adentro del lugar y la puerta se cierra atrás de ella de modo que desparece como una música que se aleja el chirrido de la puerta y el barullo del tráfico de la calle. Cuando eso desaparece ella siente haber superado algo importante. El escándalo quedó atrás. Ahora solo resta encontrar un lugar cerca de unaventana. Nótese que para explicar la exaltación se nombra la primera instancia con lo que se explica el más evidente; el sonido perturbador. Lo que implica que se puede explicar a través de otros factores, en instancias que permiten otro tipo de observaciones. A saber, la chica viste un tapado naranja, y un pantalón ancho de inclasificable estilo (moda). Lejos se encuentra esta chica de pasar...