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Estaba en ese lugar, el lugar donde me había prometido no volver a pisar en el resto de mi existencia, ¿Cómo termine aquí? En este lugar donde los recuerdos invadían mi memoria de una manera feroz en la que sentía que ya todo había terminado, simplemente estar ahí me entristecía de una manera inigualable simplemente di todo por vencido y comencé a hacer a lo que había ido
-Es fácil estar asícomo tú lo estas ahora, es sencillo estar así como si nada importara, todo sería un poco más fácil si estuvieras aquí a mi lado y no hay aquí en este lugar frio y oscuro donde solo se oyen los sollozos de los que se lamentan, aunque simplemente es imposible - Reí amargamente- a veces me pongo a pensar, solo se me revuelve el estomago de pensar en que te fuiste y cada que lo pienso siento un doloraunque haya sido tanto tiempo siento como si hubiera sido hace pocos días; pero bueno no saco nada con lamentarme si de una manera u otra ni creo que me estés escuchando así que adiós
Me levante lentamente del suelo frio que reposaba una simple y sencillo nombre -espero no tener que volver a venir aquí, solo quiero un poco de paz.
Comencé a caminar lentamente observando cómo la gente lloraba ygritaba de una manera en que yo alguna vez lo había hecho, desvié mi mirada hacia el frente intentando salir de aquel lugar en el que yo odiaba estar, una simple palabra lograba estremecer hasta el último espacio de mi: “Cementerio”.
Ir a visitar al primer amor de mi vida había sido relajante pero a la vez extraño hacia ya un tanto de años que había muerto ¿De qué? No creo que importe solo séque estará siempre en mi memoria. Iba tan hundida en mis pensamientos que ni cuenta me di cuando choque con alguien que iba entrando, sentí que me desplomaba hacia el suelo pero de pronto alguien me sostuvo por la cintura evitando que yo cayera. Al alzar mi rostro me di cuenta de que era un joven, a mi parecer muy guapo, tenía unos oscuros y penetrantes ojos cafés en los que fácilmente uno se podríaperder sin ningún problema, unos labios hermosos perfectamente imperfectos, rosas y carnosos.
-¿Estás bien?- dijo un poco preocupado
-¿He… Disculpa?- dije saliendo de mi transe
-¿Qué si estás bien?
-SI lo lamento andaba un poco distraída y no me fije
-No te preocupes, menos mal y no caíste
-Ah sí, gracias adiós- dije alejándome un poco de ahí, pero de pronto sentí que algo me tomo delbrazo y de inmediato me gire
-¿Disculpa Puedo Saber Tu Nombre?
-¿Claro me llamo Valeria y tú?
-José… José Madero
-Bueno José un gusto conocerte, adiós- dije caminando lentamente
-Adiós… Valeria- susurro tan suave que casi ni lo pude oír
Salí de ahí y solo había algo en mi cabeza: José, pero fue muy estúpido pensar que lo volvería a ver, cada cuanto vez a alguien que te encuentras en uncementerio. Subí a mi auto y me dirigí a mi casa, solo quería descansar este día había sido agotador.
Llegue a mi casa y tome un baño, sentir como cada gota de agua resbalaba por mi espalda y pasaba por mis piernas era de cierta manera relajante; luego sin ánimos comencé a checar algunas cosas de mi trabajo que desde la muerte de mi querido Santiago descuide, aunque no solo descuide eso, mi vida era undesastre estar conmigo era realmente irritante solo hablaba con respuestas cortas y sin algún rastro de alegría en mi voz.
Mi mejor amiga Sofía, ella era la única que me lograba entender aunque yo en el fondo sabía que no está completamente bien sabiendo mi gran tristeza interior. Sin darme cuenta me quede dormida. Sentir los rayos candentes del sol que se filtran por las cortinas es realmenteenceguecedor, otra vez con muy pocos ánimos para levantarme lo hice, me arregle y Salí hacia mi trabajo.
Cuando mi vida era hermosa trabajaba en un bufet de abogados, el mejor, pero desde la muerte de Santiago no volví a trabajar. Me canse un poco se estar tan mal, así que comencé a formar mi vida de nuevo; mi jefe había decidido recibirme de nuevo por mi gran capacidad.
Cuando llegue mi jefe Don...