Queiruga

En la obra La constitución moderna de la razón religiosa, Andrés Torres Queiruga trata de realizar un ensayo sobre la filosofía de la religión, dos conceptos que a priori parecen contrapuestos.

El primer capítulo, que lleva por título Las ciencias de la religión, trata de analizar las distintas ciencias desde las que se puede abordar el estudio de lo religioso. Parece obvio que la ciencia conla que mayor especificidad se pudiera abordar el tema es la teología. Sin embargo, enfoca el asunto desde dentro y desde su previa aceptación. El autor prefiere centrarse en las ciencias que la estudian desde fuera, las llamadas ciencias de la religión.
Los estudios sobre filosofía y ciencias de la religión son relativamente modernos y no van más allá de la segunda mitad del siglo XIX cuandocomienza a aplicarse el análisis científico a la religión.
Las diversas ciencias de la religión tienen por común el objeto de su estudio, si bien difieren en el modo de acercarse a él. Algunas, como la psicología y la sociología, son ciencias ajenas a la religión que en un momento dado han abordado el asunto como uno de sus múltiples campos de estudio. Otras, como la fenomenología y la historia delas religiones, surgen específicamente para abordar este campo.

La primera ciencia sobre la que nos habla el autor es la historia de las religiones. En ella distingue tres líneas. La primera, en la que predomina la resistencia a lo extraño, incluye la tradición judeocristiana y el islam, como únicas formas de religiosidad auténtica. La segunda trata la superación del partidismo religioso de laanterior, tanto el de quienes sólo consideran la teología cristiana como objeto de estudio como el de los que centran únicamente su atención sobre la visión positiva de las religiones. La tercera línea trata de superar el positivismo y admite la comprensión profunda del hecho basada en la intencionalidad de la conciencia. Destaca la importancia de la etnología y de la historia aplicada a lasreligiones de las culturas primitivas. Los resultados del estudio los resume en una doble dirección. En el aspecto material, la adquisición irreversible de la riqueza, multiplicidad y complejidad del objeto religioso. A su vez, en el aspecto formal, deja clara la necesidad de una flexibilización diversificación de los métodos, huyendo de rigideces dogmáticas, apologéticas o epistemológicas. Cabedestacar que el resurgimiento de la investigación histórico-religiosa ha significado un profundo cambio en la comprensión de la religión.

A continuación estudia la sociología de la religión, una ciencia general que quizá es la que más podría aportar, si existiera, a la ciencia general de las religiones. Esta ciencia es la que nos permite, entre otras cosas, descubrir el verdadero carácter comunitariode lo religioso. Hasta bien entrado el siglo XIX, en el espacio europeo, principalmente en el protestante, se entendía que la religión era, en última instancia, cosa privada del individuo. Esta ciencia nos ha enseñado que no existe “la religión” en sí misma, sino siempre y sólo “la religión en las religiones”. La aplicación de los principios y métodos de la ciencia sociológica al ámbitoparticular de la religión, no raramente ha incurrido en un reduccionismo que desnaturaliza la religión, buscando en esta dimensión la explicación última del fenómeno, marginando otras dimensiones constituyentes del mismo.

La psicología de la religión es también una ciencia que, constituida en sí misma, se extiende hacia el fenómeno religioso. Su contribución en el conocimiento del alma humana esinnegable. Su aportación supone un complemento fundamental para la comprensión integral del fenómeno religioso. Destaca la aportación de Sigmund Freud, a quién denomina Jano Bifronte porque, por un lado continuó con la tradición de la ilustración y, por otro, abrió nuevos espacios gracias a la interpretación psicoanalítica. Su método le permitió descubrir la compleja riqueza de los diferentes estratos...