Qui N Soy
Hace ya mucho tiempo atrás, en aquellos tiempos de castillos y reinas, existió una niña, ella no era una princesa, no era un hada, ni una sirena. Era una niña muy pequeña, linda, generosa y agradable. Sus padres eran muy trabajadores y adoraban a su pequeña niña, eran gentiles y buenos, su madre era una bruja y su padre un importante y fuerte hechicero. Elena era sunombre, sus padres eran del mundo de la brujería y hechizos, vivían en un bosque solo y apartado pero tenían bosques vecinos donde habitaban hadas y sirenas con las que ella iba y solía ir a jugar. Al cumplir sus nueve años, sufrió una terrible perdida, el padre de Elena falleció, fue una pérdida muy dolorosa, pues su padre era su gran admiración en fuerza y valor, él daba a Elena cada día leccionesde valentía y entereza, desde ese momento Elena y su madre comienzan un nuevo camino, donde ahora solo estaban ellas dos. Años más tarde, para ser exactos unos siete años, cuando ya contaba con unos bellos 17 años, su madre le hacía practicar la hechicería y los conjuros de brujería, pero Elena no se sentía a gusto practicándolos, la madre la obligaba a practicarlos a diario y se convirtió con eltiempo en una muy buena hechicera. Elena no era una joven solitaria conocía a muchas criaturas, tenía amigos y conocidos quienes la respetaban y querían, puesto que ella se había ganado este lugar. Entre todos estos amigos, Elena tenía una amiga en especial, era con quien más se relacionaba y compartía largos momentos de alegrías y risas, su nombre era Clara, era un hada, se veía como cualquierhumano, pero tenía un poder súper especial, solo con decir un conjuro secreto se convertía en una pequeña criatura, con una alas de unos quince centímetros, que le permitían volar donde ella así lo deseara.
Elena
En un bello y soleado día me acerque a mi madre y le dije: - Mama ya acabe de estudiar- le dije después de memorizar unostreinta conjuros.
- Está bien - me dijo desde su habitación de hechizos, una pequeña habitación, que estaba al final de la casa donde guardaba libros, pociones, cadáveres de animales y todas esas cosas que una buena bruja tiene.
Subí a mi habitación a cambiarme ya que no iba a salir con la bata que tenia puesta, fui y me puse un lindo vestido, muy simple de un color lavanda especial, dejemi cabello suelto y me lave la cara; aunque no vayan a creer las brujas no tenemos ese aspecto grotesco que dicen por ahí que tenemos, en realidad somos hasta más bonitas que cualquier persona, tengo una piel muy blanca, unos ojos grises azulados y un largo y oscuro cabello largo. Termine de arreglarme y fui hasta abajo para salir de la casa. Más que una casa parecía una mansión, con un feoaspecto por fuera, pero por dentro muy hermosa, con muebles de cuero blanco y gris, cerámicas muy caras y todo tipo de candelabros grandes con diamantes. Ya afuera de la casa revise mi mano donde tenía escrito con tinta un conjuro que me transportaba a donde yo quisiera, tenía que utilizar uno de ellos, ya que si deseaba llegar de prisa, hasta el bosque de las hadas, debía usarlo. Allí me encontraríacon Clara para reunirnos con Jake, un buen amigo de nosotras. Lo conocimos un día, en el que Clara y yo íbamos camino al pueblo del reino, el estaba en los límites del reino sentado en la orilla de un extenso lago que estaba por allí, Clara y yo intentamos pasar rápidamente para que no nos viera, pero igual nos vio, nos conocimos y comenzamos a hablar. El noto que yo tenía algo detrás de mi orejaderecha y pregunto que era, intente cambiar el tema ya que aquello era la hermosa, coqueta y muy indiscreta marca de hechicería con la que todas brujas nacemos, es algo así como una estrella dentro de un circulo, no estoy segura, ya que jamás lo he logrado ver bien, puesto que está detrás de mi oreja; le explique lo que era y le revele que Clara era un hada y yo una bruja, él no lo tomo a mal e...
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