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dqswddddddddddddddddddddddHay religiones que imponen determinados consumos y prohíben otros, pero ello sólo se lopueden exigir a quienes voluntariamente han adherido al respectivo credo. Así, los musulmanes prohíben el consumo del alcohol y de la carne de cerdo; los judíos exigen una preparación especial de los sacrificios de reses para poder consumirlas. También hay prohibiciones de consumo durante ciertas horas o períodos o prohibiciones parciales como en el ramadán musulmán, celebraciones religiosas judías ola semana santa cristiana.
*LOS ARGUMENTOS SANITARIOS
Puede argumentarse que sí es aceptable prohibir consumos que causen daño a las personas, pues de definitiva ello va en contra del bien común e impone costos a la sociedad, asociados a la atención que debe brindar a las víctimas y a la pérdida prematura de vidas humanas. Sin embargo, es impresentable que el Estado permita el consumo de drogascomo el tabaco y el alcohol, que provocan innegables efectos nocivos, mientras prohíbe o persigue el consumo de sustancias que causas daños similares o menores.
La única forma de superar este absurdo consiste en respetar las decisiones individuales. Cada persona debe decidir estos temas ya no está en juego la relación con los demás, sino de cada quien consigo mismo. Es imposible establecer unafrontera precisa entre lo que causa daño y lo que no lo causa pues las variantes son infinitas. ¿El Estado debe prohibir el consumo de azúcar a los diabéticos? ¿El Estado debe prohibir el consumo de Coca Cola porque provoca adicción? ¿El Estado debe prohibir el consumo de productos MC Donalds porque provocan obesidad? ¿El Estado debe prohibir el consumo de sal a los hipertensos? ¿El Estado debeprohibir el consumo de cerveza y mariscos a los que sufren de gota? ¿El Estado debe prohibir una lista de alimentos a personas con desequilibrios en el colesterol, la bilirrubina, los glicéridos?
Aparte de absurdas, estas prohibiciones resultarían inoperantes. Habría que crear una policía del consumo que vigilara a cada persona (¡Es la sociedad que Orwell describe en su angustiante novela “1984”!).Ciertamente cabe esperar que los médicos ordenen o recomienden ciertos consumos y prohíban otros, pero es cada persona la que debe aceptar o no dichas instrucciones.
De manera que fuera de argumentar con principios hay que ser pragmáticos y rechazar soluciones que en realidad no funcionan o que si funcionaran implicarían una cantidad astronómica de recursos.
Lo que le corresponde al Estado y otrasinstituciones es informar y educar para que las personas opten por patrones de consumo más sanos. Pero la persona debe decidir, y no el Estado por la persona.
*LA PARADOJA DE LA INEFICIENCIA
En casi todos los países del mundo, las políticas públicas anti marihuana se basan en tres líneas: prohibir el consumo de la marihuana, penalizar su consumo o distribución (o ambos) y crear frondosos ycaros aparatos burocráticos. Aparatos encargados de investigar sobre el tema; tribunales y cuerpos policiales para reprimir el consumo y la distribución del producto; y, como paradoja de la ineficiencia y la ineficacia de toda esta política, instituciones de apoyo a los drogadictos, hospitales, clínicas psiquiátricas y sicológicas y finalmente tribunales y cárceles para los infractores.
Así, en...
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