Rafael Herrera Valle-Un Cachorro Llamado Sam-Cuento Corto

UN CACHORRO LLAMADO SAM
CUENTO CORTO
POR RAFAEL ALFONSO HERRERA VALLE

Por más que lo intento, me es imposible precisar el momento exacto. Lo que si recuerdo con claridad es aquel infante quedespués de muchos días de ruegos y suplicas a su madre; de derramar más de una lagrima al asegurarle que él se encargaría de su aseo, que él limpiara y recogería sus gracias, y que él se haría cargo dealimentarlo; por fin, después de hacer creíble su promesas infantiles, allí estaba Sam, mi mascota.
Sam; genuino aguacatero guanaco con pedigrí, de edad desconocida y pelo de color indescriptible; seganó el corazón de todos y cada uno de los que lo conocían. De la noche a la mañana; mi madre, haciendo caso omiso de las promesa y juramentos hechos por su infante hijo, tomo a Sam como el nuevobebé de la casa, no soportando que nadie lo regañara, ni mucho menos que tratara de corregir sus travesuras y desmanes. Madre al fin.
Con la lealtad y el cariño innato que lo caracterizaba, Sam seconvirtió con el tiempo en el inseparable compañero de mi Madre en sus constantes viajes a la Tienda de Doña Fina, el que esperaba con ansias mi llegada de la Escuela, el que ponía cara de hambre cadavez que nos sentábamos a la mesa, y el que todas; pero todas las noches, me acompañó a las reuniones que los cipotes teníamos en uno de los lotes baldíos de las colonia, y presenciaba entusiasmado losjuegos de futbol en los que participaba su amo; celebrando con ladridos de alegría la anotación de cada gol; fuera del equipo que fuera.
Con el paso de los meses y gracias a los cuidador, atencionesy el amor que siempre se le brindó; Sam se convirtió en un hermoso, bello y saludable cachorro; querido por todos mis amigos y no tan amigos; pero especialmente por los niños, a los que Sam lespermitía los jalones de oreja y los abrazos un poco bruscos que él percibía como una manifestación de amor por parte de los pequeños.
Sin embargo; como todo niño mimado, Sam adquirió un mal hábito;...