Recesion economica
Todo esto causo repercusión en la industria ya quetoda la caída económica arrastro a la agricultura, dejando en la ruina a los mas modestos y sólidos agricultores aunque el gobierno federal se comprometió a comprar los excedentes agrarios –especialmente trigo y algodón- para evitar el desplome de los precios, pero no tomó ninguna medida para controlar el exceso de producción causando una sobrevaloración de productos en el mercado que solo ocasionabaque los precios cayeran mas y mas al abismo.
La lista de indicadores económicos que reflejaban la situación real, no la oficial, es larga: las inversiones empresariales bajaron de diez mil a mil millones de dólares; el producto nacional bruto se redujo a la mitad; el desempleo alcanzó los 13 millones. El presidente Hoover anunció entonces las primeras medidas para atajar el problema: laReserva Federal debería bajar los tipos de interés para incentivar la solicitud de préstamos y ayudar a los propietarios de casas a pagar sus hipotecas; había que estimular la producción y la creación de empleo con un programa de inversión pública; deberían reducirse los impuestos. Por último, los líderes políticos tenían que animar a la población con mensajes positivos, insistiendo en que la economíadel país tenía buena base y la prosperidad estaba “a la vuelta de la esquina”, resaltando la importancia de las organizaciones caritativas de carácter privado, dispuestas a proporcionar ayuda a las capas de población más afectadas, y apelando a “los principios de responsabilidad individual y local.”
Una forma de contener el gasto fue subir las tasas aduaneras a las importaciones europeas ydesinvertir en el extranjero, lo que empujó a muchos países a la devaluación de sus monedas, al desabastecimiento y al empobrecimiento general. En Estados Unidos, la falta de recursos obligó a muchos propietarios de inmuebles a dejar de cobrar los alquileres. Era preferible, como decían en Alabama, “permitir que la gente viviese gratis en las casas que dejarlas a merced de los saqueadores parautilizarlas como combustible para sus estufas.”
“Lo único que hay que temer es el propio miedo… La nación exige acciones, y acciones inmediatas.”
Fue la cita que dio el nuevo presidente al tomar el poder en 1933 y me refiero al presidente Franklin Delano Roosevelt.
Muchos estaban escépticos ya que no confiaban en un discapacitado que estaba inmovilizado a una silla de ruedas a lo que Roosevelt les...
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