Reconciliatio et penitentia.

Tema: El amor más grande que el pecado.
Fuente: Extracción apostólica:
RECONCILIATIO ET PENITENTIA.
“Juan Pablo II”, 2 de diciembre de 1984.
Nº 13-22 (segunda parte).

13- El drama del hombre.
Nosotros debemos reconocernos pecadores, solo así reconoceremos nuestra verdad como criaturas de Dios y seremos capaces de lograr el perdón divino, con el amor que el Padre derrama sobre nosotros.En realidad reconciliarse con Dios, presupone e incluye desasirse con lucidez y determinación del pecado en el que se ha caído.
Presupone e incluye hacer penitencia en el sentido más completo del término, mostrar arrepentimiento. La Iglesia interviene en cada caso con una finalidad claramente penitencial, esto es la de conducir al hombre al conocimiento de si mismo.
Se pone el ejemplo de la torrede Babel, con la cual su construcción debió ser un ejemplo de unidad, y fue un medio para crear sus propios intereses olvidándose de su verdadero arquitecto.

14- El misterio del pecado.
Si se lee la página bíblica de la ciudad y de la torre de Babel y se hace comparación con la caída de nuestros primeros padres, podemos tomar ejemplo para una toma de conciencia del misterio del pecado. Este ssin duda obra de la libertad del hombre.
La desobediencia a Dios.
De la mencionada narración bíblica emerge un primer elemento que nos hace comprender el pecado, Los hombres han pretendido edificar una ciudad, sin Dios o incluso contra Dios, se compara con el primer pecado en el Edén ante la exclusión de Dios. Exclusión de Dios, ruptura con Dios, desobediencia a Dios. A lo largo de la historiaesto ha sido la causa del pecado, la negación de Dios de su existencia, es el fenómeno llamado ateísmo. Desobediencia del hombre que no reconoce mediante un acto de su libertad el dominio de Dios sobre la vida, al menos en aquel determinado momento en que viola su ley.

15- La división entre los hombres.
En las narraciones bíblicas evoca la ruptura con Dios, que desemboca en la división dehermanos, la consecuencia del pecado es la división de la familia humana ya iniciada con el primer pecado y que llega ahora hasta el extremo social. Puesto que con el pecado el hombre se niega a someterse a Dios, también su equilibrio interior se rompe y se desata dentro de si con contradicciones y conflictos.

16- Pecado personal y pecado social.
El misterio del pecado se compone de esta dobleherida.
El pecado, en sentido verdadero y propio, es siempre un acto de la persona, por que es un acto libre de la persona individual y no precisamente de un grupo o una comunidad.
Por ser el pecado una acción de la persona, tiene sus primeras y más importantes consecuencias en el pecador mismo.
Hablar de pecado social quiere decir, ante todo, reconocer que en virtud de una solidaridad humana tanmisteriosa e imperceptible como real y concreta, el pecado de cada uno repercute en cierta manera en los demás. Es esta la otra cara de aquella solidaridad que, en el ámbito religioso, se desarrolla en el misterio profundo y magnifico de la comunión de los santos merced a lo cual se a podido decir que “toda alma que se eleva, eleva al mundo”. A esta ley de elevación corresponde por desgracia laley del descenso, de suerte que se puede hablar de una comunión del pecado, por el que un alma que se abaja con el pecado, abaja consigo a la Iglesia.
Algunos pecados sin embargo por su mismo efecto constituyen una agresión directa contra el prójimo y (más exactamente según el lenguaje evangélico) contra el hermano. Son una ofensa a Dios, por que ofenden al prójimo. A estos pecados se suelen dar elnombre de sociales y esta es la segunda acepción de la palabra, este viene a ser mucho más grave en la ley de Cristo por que esta en juego el segundo mandamiento.
Es social todo pecado cometido sobre los derechos de la persona humana comenzando por el derecho a la vida, contra el bien común y sus exigencias. Puede ser pecado de obra u omisión por parte de dirigentes políticos, económicos.
La...