RECORTE ECONÓMICO
El último informe de Idesa alerta que en el presupuesto que se dispone a aprobar el Gobierno nacional queda reconocida esa inflación implícita. Los puntos clave.
El último informe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa) acerca del Presupuesto 2016 señala que para el año próximo se reconoce una inflación implícita del27% y recortes en subsidios económicos y obra pública que anticipan el “ajuste” que el kirchnerismo en realidad adjudica a los candidatos opositores.
A continuación el informe:
“Mientras que en la campaña electoral se evita abordar definiciones con relación al desorden fiscal, el gobierno propuso en el proyecto de Presupuesto 2016 un importante ajuste en el gasto público. Explícitamente contempla recortarsubsidios económicos y obra pública. Pero los desequilibrios son tan grandes que, de manera solapada, también propone ajustes sobre prestaciones sociales y salarios públicos al contemplar aumentos nominales en estos ítems inferiores a la inflación real.
El proyecto de Presupuesto Nacional elevado por el Poder Ejecutivo al Congreso pronto será aprobado. Como sucede desde hace una década, a pesarde estar formulado sobre premisas falsas de crecimiento económico e inflación, obtendrá su aprobación de manera automática y acrítica por parte de diputados y senadores oficialistas. Se persevera en la degradación de una de las instituciones más importantes de la República. En sociedades modernas, el Presupuesto es el instrumento central de rendición de cuentas a los ciudadanos por el uso de losrecursos públicos y la planificación de las acciones futuras. Sus inconsistencias no impiden que las autoridades económicas reconozcan que la situación fiscal es insostenible. Prueba de ello es que para el año 2015 proyectan un déficit fiscal de $138 mil millones que se postula reducir en el año 2016 a $94 mil millones.
Para lograr la reducción, el oficialismo propone aplicar los siguientesajustes:
La recaudación impositiva y de cargas sociales se estima subirá un 25%.
El gasto en jubilaciones subirá 25%, las asignaciones familiares el 20%, los salarios públicos el 19% y la obra pública sólo un 11%.
Los subsidios económicos a la energía, transporte y empresas públicas disminuirán en términos nominales un -2%.
Estos datos muestran que el oficialismo está proponiendo que el próximo gobiernoaplique el ajuste fiscal cuya necesidad negó sistemáticamente en los últimos años. Salvo las jubilaciones, que legalmente están protegidas por la ley de movilidad, en el resto de los gastos sociales se prevén aumentos por debajo del incremento de la recaudación. Particularmente visible es el reducido aumento nominal en el presupuesto asignado a obra pública y la reducción en valores nominales delos subsidios económicos.
A esto se suma el ajuste fiscal que se proyecta aplicar vía licuación de gastos a través de aumentos en los precios. El propio Presupuesto señala que para el año 2016, además de un déficit fiscal de $94 mil millones, se proyecta transferir desde el Banco Central hacía el Tesoro nacional otros $68 mil millones. Por lo tanto, el desequilibrio fiscal llegaría a los $162 milmillones equivalente al 2,5% del PBI. Como la cantidad de monedas y billetes en poder del público asciende a aproximadamente 9,3% del PBI, el nivel de déficit fiscal proyectado representa un 27% del dinero circulante. Esto implica que, si todo este déficit se financia con emisión monetaria, el piso de inflación para el año 2016 será del 27%. En otras palabras, el Presupuesto contemplaimplícitamente que la inflación licue gasto público.
Es cierto que, como se menciona recurrentemente en la campaña electoral, parte de este déficit se puede financiar con endeudamiento, es decir, con emisión de títulos públicos. Pero esta fuente de financiamiento tiene limitaciones. Además de restablecer el acceso a los mercados internacionales, para lo cual se requiere regularizar la situación con los...
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