Reflexion
Dios en su infinita misericordia ha mostrado su eternoLamentablemente nos ha tocado vivir dentro de una humanidad que se ha estado dirigiendo por un rumbo sin Dios. Dios, no trazó ese camino. Desde el principio de la creación,nuestro Dios ha predeterminado un propósito de bendición para nosotros. (Juan 3:17) Un propósito de regeneración, salvación y transformación. Nos preguntamos,¿transformarnos? ¿Cómo? ¿Quién? y ¿Para qué?
Sí, transformarnos en nuevas criaturas, seres humanos sensibles, bondadosos, amables, misericordiosos. Una transformación genuina queayudará a muchos a sentirse aceptados y amados por otros. Más aún, vivir bajo el amparo y protección de un Dios tan y tan poderoso que puede abrazarnos con amorinigualable. (Sal. 91)
Las noticias que han ocupado primera plana en los periódicos de nuestros países, causa un gran dolor en nuestros corazones cuando se trata de un NIÑO.Niños que necesitan de una iglesia que vaya dándole forma a su carácter, a sus sentimientos, a su inseguridad y desesperanza. Muchos han sido privilegiados, no así,otros. (Mat. 24)
Dar amor, Palabra de Dios, brindar ayuda (social, espiritual, material) a un niño cerca de nosotros, nos ayuda a transformarnos en mejores creyentesdentro de nuestra; familia, iglesia, sociedad, comunidad. (Hebreos 13:16) No te olvides, mira a tu alrededor, un niño necesita ser ayudado por Ti, Iglesia, Pastor,Creyente. Amén.
amor para con la humanidad. La humanidad la componen hombres, mujeres, ancianos, jóvenes y niños. ¡Qué hermosa, es su magna creación! (Gén. 1:31)
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